Connect with us

Nación

En México, cuatro de las cinco ciudades más violentas del mundo

Foto: Regina García

En México están cuatro de las cinco ciudades donde se cometen más homicidios del mundo, informó José Antonio Ortega Sánchez, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal A.C., al dar a conocer el Ranking 2018 de las ciudades más violentas.

En total son 15 ciudades del país las que se encuentran en el listado, lo que se atribuye a las disputas entre la delincuencia organizada por el control de las plazas y que se evidencia con la violencia en las calles.

De acuerdo con el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal A.C., México se mantiene como el país más violento al igual que en 2017, solo que en esta ocasión pasó de doce a quince ciudades dentro del citado ranking de las ciudades más violentas. Los Cabos, La Paz y Mazatlán lograron salir de esta lista en 2018 pero no se debe a una adecuada aplicación de políticas públicas, sino que un grupo criminal se impuso a sus rivales y los expulsó de las “plazas” pero esto solo puede durar dos años máximo, después vendrá un repunte de la lucha por recuperar las mismas, según expertos en el tema.

Te puede interesar: «Organizaciones civiles exigen pluralidad y respeto a AMLO»

Los seis criterios principales para considerar la inclusión de una urbe en el ranking son:

Debe ser una unidad urbana claramente definida. No puede ser un área o jurisdicción que sea parte de una ciudad ni pertenecer a un municipio (o jurisdicción equivalente) que en lugar de ser predominantemente urbano sea predominantemente rural.

La urbe en cuestión debe tener 300 mil o más habitantes, según datos demográficos de fuentes oficiales.

Los datos sobre homicidios deben corresponder a las definiciones universalmente aceptadas de los homicidios dolosos u homicidios intencionales o muertes por agresión (con la excepción de muertes en operaciones de guerra o la muerte legalmente justificada –no en ejecuciones extrajudiciales– de agresores por parte de agentes del orden). No se incluyen cifras sobre homicidios en grado de tentativa.

Las cifras de homicidios deben provenir de fuentes oficiales o fuentes alternas. En cualquier caso los datos, las estimaciones y la metodología de cálculo deben ser verificables y/o replicables. En algunos casos los datos son resultado de un conteo propio, a partir del análisis de notas
periodísticas.

Las cifras deben corresponder al año anterior en que se difunden los resultados. Sólo de manera excepcional se pueden considerar los datos de un año anterior (los de 2014 para 2015, por ejemplo), ante la presunción fundada de que no hubo variación sustancial de la incidencia de homicidios.

Las informaciones deben ser asequibles a través de Internet.

Respecto a la nueva administración federal y su estrategia de seguridad nacional, José Antonio Ortega mencionó que si la Guardia Nacional se enfoca en aplicar la ley, aislar a los estados, a los fiscales, a los procuradores, a investigar y castigar los homicidios y no solo eso, sino todos los delitos, podemos esperar que esta violencia baje. Si no hay un cambio en la política, si pensamos como dice el presidente López Obrador que con el reparto de dinero a los ninis, a los adultos mayores y toda la política, “que desde mi punto de vista es clientelar”, no se va a resolver con esa política la violencia sino se va a seguir incrementando.

La Guardia Nacional puede ayudar si es que se suma a investigar y aplicar la ley, no violando los derechos humanos, si hace eso “vamos a tener buenos resultados, pero si fracasa en esa situación, se va a convertir en un infierno, lo que ya sucede en algunos estados del país. Estamos en un momento sumamente grave, ya que la violencia en el país se incrementó de 12 a 15 ciudades en este ranking”.

Dijo que “estamos muy a tiempo, el gobierno cumplió 100 dias esta semana. Es necesario que se establezcan sanas políticas públicas en este tema para que la línea de los homicidios y la violencia baje, si continuamos con esta tendencia, estas cifras van a empeorar”.

Hay que entender que la guerra no es de los grupos de delincuencia organizada hacia el gobierno, sino entre esas milicias privadas, añadió. Las políticas del presidente López Obrador y Calderón son diferentes. No hubo una política pública adecuada para usar al ejército, porque apenas llegaban unos batallones a Nuevo León y ya los estaban mandando a Acapulco u otro lado.

Te puede interesar: «Promete AMLO erradicar corrupción e impunidad al ser ungido candidato de Morena»

Refirió que “el factor que falló desde mi punto de vista, en lo que hizo Felipe Calderón, fue Genaro García Luna, que no tenía una claridad de la estrategia que se tenía que seguir y que desde mi punto de vista hubo una protección al cártel del Sinaloa desde su lado de Genaro García Luna, eso fue lo que falló al presidente Calderón para abatir la violencia en México y evitar que se iniciaran dos guerras tremendas que llevaron a México a una violencia altísima que se desarrolló en Ciudad Juárez, la cual durante tres años fue la ciudad más violenta del mundo y la otra fue Tijuana, donde El Chapo peleaba con los Arellano Félix.

Inquirió: ¿qué diferencia hay de eso con las políticas públicas que está aplicando el presidente López Obrador?, apenas van cien días y todavía no puedo valorar la diferencia pero lo único que veo es que la política pública que está aplicando, si sigue así no nos va a resolver el problema que tenemos. No solamente hay que tener a las fuerzas armadas en las calles, hay que aplicar una buena política pública de abatimiento de la impunidad, tiene que haber un trabajo más profundo para poder abatir la violencia, si nada más está la Marina o alguna otra fuerza federal en las calles, el solo hecho de estar ahí no va a resolver el problema, remató.

Por: Regina García

Leer más
Publicidad


Síguenos en Facebook

Publicidad

Síguenos en Twitter

Recomendaciones