Plácido Domingo es acusado de acoso sexual por al menos 9 mujeres

Esta mañana se dio a conocer que al menos nueve mujeres han acusado al tenor español Plácido Domingo por presunto acoso sexual. La agencia de noticias Associated Press (AP) recabó los testimonios de ocho cantantes y una bailarina, quienes aseguran que este «comportamiento inapropiado» tiene antecedentes en la década de los 80.

De acuerdo con la información revelada por AP, Domingo Embil, considerado una de las figuras más icónicas en la historia de la ópera, se valió de su fama y cargos y encargos para presionar a muchas mujeres a mantener relaciones sexuales con él o, de lo contrario, «castigarlas en lo laboral».

Aunque en la actualidad Domingo ostenta uno de los cargos más prestigiados entre la élite musical como director de la Ópera de Los Ángeles, quienes han hecho los señalamientos, así como distintas personalidades de la escena, afirman que existe un «lado preocupante» de su identidad y que ahora está tachado como un «secreto a voces» al interior del gremio.

Según dichas declaraciones, el tenor sacaba provecho de las compañías de ópera en las que ocupaba puestos de primer nivel para, frecuentemente, tocar las piernas y «pasar la mano por la falda» sin el consentimiento de sus víctimas; otras denunciantes relatan que en muchas ocasiones fueron obligadas a besarlo en los labios tras ser llevadas a habitaciones de hotel, comidas de negocios, entre otros lugares.

«Una comida de negocios no es extraño, pero que alguien te ponga la mano sobre la rodilla sí lo es. Siempre estaba intentando tocarte de alguna manera», confesó una de las nueve afectadas a quienes se sumó un grupo de seis que revelaron que, una vez contratadas, Domingo Embil les hizo una serie de proposiciones incómodas como invitaciones a salir por motivos extra laborales.

Nueve ofendidas directas, media docena más de denunciantes y, por si no bastara, existe asimismo más de una decena de testigos, entre intérpretes, bailarines, músicos de orquesta y profesores de voz, que aseguran haber presenciado el comportamiento sexual «inapropiado» del músico, particularmente su acoso en «total impunidad» contra mujeres jóvenes, valiéndose del estatus del que gozó en cada una de las compañías con que colaboró.

De las múltiples voces que se han elevado para sancionar los presuntos viejos agravios del tenor, al menos ocho han manifestado que sus carreras se vieron seriamente afectadas tras rechazar las presiones de Domingo, y que inclusive les fueron revocados los contratos, independientemente del papel que habían obtenido y de la compañía que las representara.

Por otra parte, del total de las informantes, que por temor a las represalias han preferido mantener el anonimato, sólo una otorgó su beneplácito para que su nombre fuera revelado: Patricia Wulf, reconocida mezzosoprano que antaño actuó junto a Domingo en la Ópera de Washington.

Una de las involucradas admitió que en diversas ocasiones cedió a las presiones de Domingo y mantuvo relaciones sexuales con él en un hotel próximo al lugar donde se presentaban; la relatora explicó que, en una ocasión, el cantante le dejó un billete de 10 dólares junto a la cama, así como una nota: «No quiero que te sientas como una prostituta, pero tampoco quiero que tengas que pagar por estacionarte».

De acuerdo con AP, el testimonio de las denunciantes coincidió en más de un aspecto y la incitación siempre fue la misma: la oportunidad de conocerlo en persona, de forma privada, por medio de una invitación a comer o a tomar una copa, ya fuera en su departamento o en alguna habitación de hotel, con el pretexto de que durante el encuentro les ofrecería un asesoramiento profesional y personalizado para acercarlas al privilegiado sitio que ocupaba en la industria musical.