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Internacional

Los mensajes que exhiben las maniobras del juez de ‘Lava Jato‘

Foto: Twitter

Nuevas filtraciones publicadas por la revista brasileña Veja y por el medio digital The Intercept Brasil demuestran que el ex juez y actual ministro de Justicia de Brasil, Sergio Moro, colaboró directamente con los fiscales involucrados en la operación Lava Jato para encarcelar al ex presidente Lula Da Silva.

Una serie de conversaciones sostenidas a través del servicio de mensajería instantánea Telegram, obtenidas de una fuente anónima, revelan que Moro solicitó a la fiscalía que en el proceso se integrara un grupo de evidencias que acelerasen u obstaculizasen las operaciones anticorrupción, o bien que determinadas «delaciones premiadas», es decir, confesiones a la Justicia a cambio de beneficios penales, no fueran llevadas a cabo.

«Lo que se desprende de los documentos examinados, aparte de una intimidad excesiva entre la magistratura y la acusación, es una evidente asociación en la defensa de una causa», explica la publicación este viernes del artículo de Veja.

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Por su parte, según documentos publicados por The Intercept Brasil con base en la filtración de diversas conversaciones privadas que Moro sostuvo con los fiscales involucrados en Lava Jato, muestran que la injerencia de estos en el arresto y aprisionamiento de Lula fue directa.

En la primera parte de este acervo desclasificado, se muestra una serie de presuntas consultas para perjudicar la candidatura de Lula Da Silva y más tarde la de su sucesor en la carrera presidencial de 2018 por el Partido de los Trabajadores, Fernando Haddad.

A partir de la filtración de estas nuevas evidencias, el equipo jurídico del ex mandatario izquierdista comenzó a señalar a Sergio Moro, que tenía particular interés en el caso de Lula, como un juez «que nunca fue imparcial» y, por ende, se prevé la solicitud de anulación de su condena de 8 años y 10 meses de cárcel por los delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero, misma que fue ratificada en primera instancia por dos tribunales superiores y pronunciada por Moro.

Asimismo, de acuerdo con la publicación digital del pasado viernes 5 de julio de Veja, entre los mensajes filtrados figura el caso del ex presidente de la Cámara de Diputados Eduardo Cunha, principal artífice del juicio político contra la ex presidenta Dilma Rousseff, y que en la actualidad se encuentra preso por los delitos de corrupción y blanqueo de dinero.

Las conversaciones publicadas por Veja exponen que Moro quería evitar la colaboración de Cunha con la justicia, confesión que, según la revista, podría implicar gravemente al ex presidente Michel Temer, quien además figura como uno de sus más estrechos colaboradores.

En segmentos posteriores, las conversaciones evidencian los esfuerzos de Moro por adjudicarse, en conjunto con el procurador, ciertos procesos que en el marco de la legislación brasileña corresponden al Tribunal Supremo Federal (STF, por sus siglas en portugúes) por implicar a políticos con aforamiento.

Por otra parte, Veja arroja luz sobre un episodio en el que, en agosto de 2015, Moro habría mentido al juez a cargo de los casos de Lava Jato en el STF, Teori Zavascki, al declarar que «no sabía nada» sobre la presunta implicación de funcionarios públicos en un proceso contra el empresario Flávio David Barra, presidente de AG Energia.

Veja indicó, entre otras cosas, que analizó un total de 649 mil 551 mensajes haciendo énfasis en que se trata de «comunicaciones verdaderas», ratificando así su conclusión de que, en efecto, Moro sí habría cometido irregularidades en el proceso contra Lula Da Silva y otras personalidades implicadas en Lava Jato.

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