‘El Bronco’ exhibe debilidad de instituciones electorales

La inclusión de Jaime Rodríguez Calderón «El Bronco» en la elección presidencial por orden del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación puso en tela de juicio la legalidad de los comicios del primero de julio. La estampida que se desató con el fallo ya impactó a las instituciones electorales, las cuales se han «pasado la bolita» entre ellas debido a las críticas lanzadas por políticos, intelectuales y la ciudadanía en general.

El fallo del ‘Trife’ determinó que el Instituto Nacional Electoral debía avalar la candidatura independiente de ‘El Bronco’. Siendo su principal argumentación que el INE violó el «derecho de audiencia» de Rodríguez Calderón, el Tribunal obvió una serie de irregularidades en la recolección de firmas.

Magistrados apadrinados del PRI y Miguel Barbosa metieron a ‘El Bronco’ en la boleta

Janine Otálora Malassis, magistrada presidenta del Tribunal, criticó que las instituciones electorales no pueden permitir que individuos que incurren en acciones que «cuestionen su ética y su compromiso con la democracia». Mucho menos quien aspira al cargo de elección popular más importante de México. Otálora Malassis emitió uno de los tres votos en contra de ‘El Bronco’, junto a Reyes Rodríguez Mondragón y Felipe de la Mata, pero no bastaron.

Simultáneamente el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, anunció que el Instituto acataría el fallo y reconocería la candidatura del gobernador con licencia de Nuevo León. Agregó que el proceso para avalar a aspirantes independientes, el cual fue criticado desde el primer día, seguiría como tal. Aunque reconoció que algunas áreas deben mejorar, el consejero catalogó las acciones de los encargados técnicos del INE como ‘pulcras y neutrales’.

Al día siguiente Córdova terminaría de deslindarse de las responsabilidades. Aseguró que el INE solo acató el fallo del Trife. Mientras que la última la palabra la tendrá la Fiscalía Especializada en Atención a Delitos Electorales, organismo que continuará la investigación sobre las irregularidades de Rodríguez Calderón. El Instituto ya presentó la denuncia en contra de ‘El Bronco’ ante la Fepade.

¿Al diablo las instituciones?

Intelectuales y académicos que en el pasado criticaron a quien mandaba «al diablo las instituciones» han expresado su descontento con las acciones de los árbitros del proceso electoral. Voces como la de Enrique Krauze, Denise Dresser, o Héctor Aguilar Camín se volcaron sobre las redes sociales y en contra del TEPJF, INE y la Fepade por igual.

Pero fue Diego Valadés, investigador jurídico de la Universidad Nacional Autónoma de México, quien publicó un extenso análisis del impacto de esta decisión en su cuenta de Twitter. Finalmente sentenció que «86 millones de ciudadanos estamos en la lista nominal y podremos votar el primer de julio, pero luego dependeremos de los siete jueces en la lista real«.

Las reacciones de los rivales

Desde antes del fallo los seguidores del Movimiento Regeneración Nacional ya comentaban que la inclusión de ‘El Bronco’ responde a los intereses de la ‘mafia del poder’. En concreto, restarle votos a Andrés Manuel López Obrador. Fue Ricardo Monreal, coordinador regional de la campaña presidencial, quien ‘cantó’ la decisión del Trife mucho antes de que terminara la deliberación.

Siguiendo con esta tendencia López Obrador se ha pronunciado en contra del fallo. Primero culpó a los demás partidos, como Acción Nacional, de nombrar a los magistrados que metieron a ‘El Bronco’ en la boleta. Luego asegurando que Rodríguez Calderón había pactado con el presidente Enrique Peña Nieto para llegar a la elección.

Margarita Zavala, también independiente, criticó la decisión aunque dijo respetarla. Por medio de su cuenta de Twitter dijo que en la boleta aparecerán tres candidatos de los partidos, uno del tribunal y «la candidata de los ciudadano».

José Antonio Meade le dio la bienvenida ‘El Bronco’, pero pidió una revisión de la ley electoral para evitar futuras irregularidades. Mientras que Ricardo Anaya catalogó el fallo como una sorpresa que, a la larga, no tendrá mayor impacto en el desarrollo de la contienda presidencial, ni como ventaja o como desventaja.

No me querían, ahora me tienen que aguantar: “El Bronco”