El cuñado del rey de España ya duerme en prisión

Iñaki Urdangarin, cuñado de Felipe VI, rey de España, ingresó este lunes a la cárcel de Brieva, cerca de la ciudad de Ávila, donde cumplirá una sentencia de casi 6 años incurrir en fraude y evasión fiscal.

Ex jugador olímpico de balonmano y esposo desde 1997 de la infanta Cristina, lleva 12 años en proceso jurídico a raíz del descubrimiento de que malversaba varios millones de euros de dinero público a través de la fundación Nóos, una organizacón sin ánimo de lucro que firmó contratos millonarios con administraciones públicas y desvió sus ganancias a través de sociedades pantalla.

Esta es la primera vez en la historia moderna de España que el pariente de un monarca entra en la cárcel. Cuando se conoció la resolución del Supremo el pasado día 12, la Casa del Rey expresó su «respeto absoluto a la independencia del poder judicial».

Urdangarín, quien fuera llamado alguna vez «el yerno favorito» del rey Juan Carlos I, y su esposa, la infanta Cristina, fueron apartados de los reflectores y de la vida pública desde 2011, cuando el ex jugador olímpico fuera imputado por las autoridades. Posteriormente, en 2014, dejaron de ser parte de la familia real, cuando el mandato de la Casa Real pasó a manos de Felipe VI.

Iñaki, quien fuera presentado como un «hombre perfecto» y una persona ejemplar desde su casamiento con Cristina, sería denostado por la opinión pública poco a poco, hasta que todo cambiaría durante su formación en la prestigiosa escuela de negocios ESADE de Barcelona, donde conoce al profesor Diego Torres, su futuro socio de negocios, y cómplice en los fraudes. Ambos fueron condenados por la malversación de fondos.

Las especulaciones en torno a los motivos del cuñado del rey de España no dejan de aumentar en los medios, pues se cuestiona por qué un hombre «que lo tenía todo» incurrió en tales actos. Asimismo, también la infanta Cristina fue sancionada con una multa de 136 mil 950 euros, por considerarse beneficiaria de la trama.