Científicos estiman que vacuna contra Covid-19 no sería efectiva en casos de obesidad

La espera por la vacuna contra el Covid-19 continúa; sin embargo, científicos han identificado que además de que el antídoto podría no llegar lo suficientemente rápido como se espera, existiría un sector de la población en el cual no podría ser efectiva y es a las personas que padecen obesidad.

El sitio BGR expuso que los estudios realizados en Estados Unidos para encontrar la vacuna podrían demorar hasta fin de año pese a la premura del presidente Donald Trump para que esté lista incluso antes de las elecciones presidenciales que se celebrarán en el mes de noviembre.

Sin embargo, se dio a conocer que el sector poblacional con obesidad puede no resultar apto para la sustancia y esto afectaría a más de 107 millones de estadounidenses catalogados de obesos, pues ya se conoce que las vacunas son menos efectivas cuando se suministran a adultos con obesidad a diferencia de quien no lo padece. Esta estimación se ha visualizado en protecciones de todo tipo, desde la influenza, tétanos e incluso la rabia, por lo que es probable que la sustancia contra el SARS-COV-2 podría seguir el mismo patrón.

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Ante el panorama explicado por la comunidad científica, el profesor asociado de nutrición en la Universidad de Carolina del Norte-Chapel Hill, Raz Shaikh, respondió que «de ninguna manera» habrá una vacuna contra Covid-19 adaptada a los obsesos para el próximo año por lo que «nuestra predicción es (que) no» sean candidatos viables por ahora para librar la enfermedad.

Desde el inicio de la pandemia, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) advirtieron que las personas que corrían más riesgo de sucumbir al contagio eran aquellas que mostraran un índice de masa corporal superior a 40, incluidas las personas consideradas con más de 100 libras de sobrepeso. No obstante, conforme se estudió el virus se detectó que cualquier ciudadano con un índice de masa corporal de al menos 30 podría contraer la enfermedad con mayor facilidad dejando a un 42 % de la población en Estados Unidos en alerta de ser contagiado rápidamente.

Hasta este agosto el CDC ya contempla una lista de los pacientes que podrían resultar agravados por la infección los cuales padecen las siguientes condiciones: enfermedad renal crónica, EPOC o enfermedad pulmonar obstructiva crónica, obesidad, en estado inmunodeprimido con el sistema inmunológico débil por trasplante de órganos, afecciones cardiacas, anemia y diabetes tipo 2.