Cadena de frío o ultracongelación: el reto para la distribución de la vacuna de Covid-19

Ocho meses después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara como pandemia los distintos brotes regionales de Covid-19, a causa de la circulación internacional del nuevo coronavirus SARS-CoV-2, las candidatas a vacuna para hacer frente a la enfermedad han comenzado a registrar sus primeros resultados para combatirla, pero el siguiente reto a vencer es el de la distribución por la ultracongelación.

Pfizer fue la primera farmacéutica en anunciar que su vacuna contra el SARS-CoV-2 estaba presentando una efectividad del 90%, poniéndola junto a otros productos de este tipo, anunciando además que sus estudios podrían concluir este mismo mes, por lo que una aprobación eventual de la FDA en Estados Unidos les hará iniciar la producción.

La noticia alegró al mundo, se politizó adjudicando triunfos a presidentes antes que a sus diseñadores e impulsó los mercados bursátiles mundiales al generar mayor confianza en el desarrollo económico global en 2021. Sin embargo, la duda sobre la accesibilidad de la vacuna contra Covid-19 no llegó por su precio sino por el equipo que se requiere para su conservación, puesto que requiere resguardarse por debajo de los -70°C.

Este proceso se conoce como «Deep-Freeze» o ultracongelación y pondría en jaque las adquisiciones por parte de diversos países. El doctor Alejandro Macías, excomisionado nacional para la prevención y control de la influenza A (H1N1) de México, señaló que el producto de Pfizer al ser una vacuna de ARN requería temperaturas ultra frías para su transporte, de modo que sería poco viable para países en desarrollo.

«La respuesta es no, México no tiene una red de ultracongelación, como lo tiene ningún país del mundo», explicó Hugo López-Gatell, subsecretario de Promoción de la Salud, enfatizando que antes de firmar los contratos para su adquisición deben evaluar la posibilidad real de garantizar este sistema a fin de que el producto esté en las condiciones adecuadas.

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Este dijo que ello sería posible si se hablara de una sola dosis o un puñado de dosis por aplicar eso no sería un reto, pero que al tener que aplicar millones de dosis en un máximo de 5 días, tiempo que el producto puede utilizarse luego de ser descongelado, entonces el reto sería muy grande.

«La Organización Mundial de la Salud ya lo ha expresado, todos los países, si es que quieren utilizar esta vacuna, deberían considerar que no pueden adquirirla a menos que haya una red no de refrigeración, sino de ultracongelación»

Hoy el mundo recibió la noticia de la vacuna de Moderna, cuyo primer estudio intermedio señala que tendría una efectividad de 94.5%. Aunque nuevamente fue ese dato el que despertó interés en la nota, médicos como Alejandro Macías señalaron que el que pueda almacenarse a -20°C la podría hacer más viable para varios países como México.

Drew Amstrong, editor de cuidado de la salud en Bloomberg News, también destacó que el producto de Moderna tuviera como requisitos de almacenamiento estar 6 meses a -20°C, habiendo además 30 días de utilizar el producto después de la descongelación manteniéndolo entre 2° y 8° grados. «Son las temperaturas normales del congelador y el frigorífico. Elimina un gran obstáculo logístico.», declaró.

Estos datos también alentaron la apreciación del Dow Jones, el S&P500 y el Nasdaq en 1.6%, 1.16% y 0.8%, en tanto que las acciones de Moderna reportaron 9.55% de crecimiento y las de BioNTech y Pfizer se desplomaron 13.66% y 3.34% con el anuncio de las temperaturas de refrigeración necesarias para la vacuna.

El Foro Económico Mundial también colocó el tema sobre la mesa. A través de su portal, Toby Peters, profesor especializado en sistemas de enfriamiento para medicamentos de la Universidad de Birmingham, y señalando que la distribución de la vacuna podría ser el mayor desafío logístico al que se haya enfrentado la humanidad, pero que lo sería especialmente en África subsahariana. Al respecto, el médico Karan Sagar, de la GAVI Alliance, también mencionaba que pocas economías tendrían capacidad para una cadena de ultracongelación.

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La importancia de los datos presentados para la economía también volvió a notarse este lunes cuando al presentase alentaron la apreciación del Dow Jones, el S&P500 y el Nasdaq en 1.6%, 1.16% y 0.8%, en tanto que las acciones de Moderna reportaron 9.55% de crecimiento y las de BioNTech y Pfizer se desplomaron 13.66% y 3.34% con el anuncio de las temperaturas de refrigeración necesarias para la vacuna.

En tanto, el profesor de la Facultad de Medicina y jefe del Laboratorio de Microbioma, Samuel Ponce de León, advierte en su cuenta de Twitter: No hay luz al final del túnel todavía. “Debemos mantener nuestras acciones preventivas con énfasis en el cubrebocas mientras no se cubra la cuota de población inmune. Las vacunas llegarán como una herramienta adicional pero no son una bala de plata”.