Reino Unido y Dinamarca alertaron esta semana que el sublinaje BA.2 de la variante Ómicron del coronavirus SARS-CoV-2 podría estar ser más transmisible y estaría desplazando a la mutación «original», BA.1, detectada por primera vez en Sudáfrica durante noviembre de 2021 y causante de la nueva ola de casos de Covid-19 a nivel mundial.

La Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido (UKHSA, por sus siglas en inglés) informó ayer que clasificó al sublinaje BA.2 de Ómicron como una «variante bajo investigación». Pese a que señaló que todavía no es la dominante, precisó que la decisión se tomó luego de observar un número creciente de secuencias en varios lugares de su territorio.

Respecto a sus características, la autoridad sanitaria del Reino Unido señaló que primeros análisis sugieren que tiene una mayor transmisión en comparación a BA.1; sin embargo, precisaron que las tasas de crecimiento tienen un bajo nivel de certeza al principio de la aparición de una variante, por lo que se necesita un análisis más profundo.

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En tanto, Meera Chand, directora de incidentes de COVID-19 de la UKSA, apuntó que tampoco hay hay evidencia suficiente para determinar si esta nueva mutación causa enfermedad más grave que BA.1, por lo que continuarán investigando al respecto.

Hasta el 21 de enero, la iniciativa GISAID, tenía el reporte de 8,040 secuencias de BA.2 desde el 17 de noviembre de 2021; sin embargo, destaca que la mayor aportación de estos casos provienen de Dinamarca con 6,411 confirmaciones de su presencia en muestras analizadas.

Fue el pasado jueves cuando el Instituto Statens Serum (SSI) se pronunció señalando que el sublinaje BA.2 estuvo presente en el 20% de todos los casos detectados de Covid-19 en Dinamarca de la semana epidemiológica 52 del 2021; mientras tanto, para la semana epidemiológica 2 de 2022 aumentó al 45%. A la par, la frecuencia de muestras secuenciadas mostró una disminución de BA.1.

«Otros países también experimentan un aumento en los casos de BA.2: por ejemplo, Gran Bretaña, Noruega y Suecia, pero aparentemente su aumento en números hasta ahora no está al mismo nivel que en Dinamarca», informó en un comunicado.

Adicionalmente, el instituto mencionó que sus análisis iniciales no muestran diferencias en las hospitalizaciones causadas por esta versión del SARS-CoV-2; en tanto, anunció que ya están en curso los análisis relacionados con su virulencia y la eficacia de las vacunas.