Una periodista a cargo de la seguridad en un país donde se mata a mujeres y a prensa

Rosa Icela Rodríguez fue la principal sorprendida al ser nombrada como próxima Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, según narra el propio presidente Andrés Manuel López Obrador. No es para menos ya que la periodista de profesión, pero con una carrera de más de 20 años en gobierno, será la primera mujer al frente de la estrategia de seguridad en un país en el que la violencia de género y contra la prensa constantemente dispara alarmas internacionales.  

El primer mandatario anunció el nombramiento de Rodríguez, “aunque ni ella lo sabía”, durante su conferencia matutina del viernes 30 de octubre. Esto a propósito del intercambio que sostuvo con la periodista y activista ‘Frida Guerrera’, quien desde el mes de febrero acude periódicamente a las ‘mañaneras’ para denunciar casos de violencia de género y solicitar que el informe mensual de la Secretaría de Gobernación en dicho tema sea presentado en ese espacio. 

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De acuerdo con el informe mensual de seguridad pública, el último presentado por Alfonso Durazo apenas una semana antes del anuncio de Rodríguez, desde el inicio de la actual administración en diciembre de 2019 hasta septiembre de 2020 se habían cometido en México un total de mil 788 feminicidios. Incluso, en el periodo enero-septiembre de este año, estos delitos registraron un alza del 0.4 por ciento con relación al año pasado. 

A inicios de octubre, Amnistía Internacional y la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación en contra de las Mujeres de la Organización de las Naciones Unidas advirtieron que “no hay avances sustantivos” en la mitigación de la violencia de género en México. Señalando particularmente el caso de los feminicidios que, si bien ya está tipificado en 31 entidades de la República, en cada estado hay disparidades en cuanto a condenas y al tipo penal.  

Aunado al informe de Amnistía Internacional y la CEDAW, por sus siglas en inglés, la propia secretaria de Gobernación, Olga Sánchez-Cordero, reconoció que “las muertes violentas de mujeres no cesaron ni disminuyeron durante los meses que llevamos de pandemia”. Esto durante una comparecencia ante la Cámara de Diputados con motivo de la glosa del Segundo Informe de Gobierno de López Obrador.  

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Junto a la violencia de género, Rodríguez también tendría que enfrentar los delitos contra la prensa que, en lo que va de la gestión de López Obrador, han cobrado la vida de 18 periodistas. El más reciente de estos casos, el asesinato de Arturo Alba Medina en Ciudad Juárez, Chihuahua, ocurrió prácticamente al mismo tiempo que el presidente anunciaba, en la Ciudad de México, que la exreportera de ‘La Jornada’ ocuparía la vacante de la SSPC.  

De acuerdo con la Clasificación Mundial de Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras, en este año México se sitúa en el puesto número 143 de 180 para ejercer el periodismo, formando parte de las naciones con ‘situación difícil’. Mientras que el Comité de Protección a Periodistas lo coloca en el sexto lugar del Índice Global de Impunidad al tener 26 asesinatos de periodistas impunes. Siendo superado solo por Somalia, Siria, Irak, Sudán del Sur y Pakistán.  

Apenas un día antes de que López Obrador anunciara a Rodríguez como relevo de Durazo, Propuesta Cívica ‘revivió’, por medio de programas de software, a Javier Valdez, asesinado en 2017 por investigar al Cártel de Sinaloa. En un video, el periodista muerto exige justicia por su caso y por los más de 130 informadores ultimados desde el año 2000. Posteriormente, la organización lanzó un decálogo de propuestas para combatir la violencia contra la prensa y su impunidad. 

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Rodríguez estudió en la Escuela de Periodismo Carlos Septién y ejerció el oficio como reportera de ‘La Jornada’ antes de asumir la Dirección de Comunicación Social de la entonces Asamblea General del Distrito Federal. Durante su gestión como Jefe de Gobierno, López Obrador la sumó a su equipo como directora general de Participación Ciudadana y, posteriormente, de Concertación Política, desde donde le ayudó a coordinar las 70 coordinaciones de seguridad pública.  

Durante la primera parte del gobierno del canciller Marcelo Ebrard, Rodríguez coordinó su Gabinete de Seguridad, siendo nombrada titular del Instituto para la Atención de los Adultos Mayores en la segunda. Con Miguel Ángel Mancera continuó desempeñando cargos de bienestar, como secretaria de Desarrollo Social y de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades. Algo que López Obrador ponderó ya que “seguridad y bienestar son fundamentales, se ensamblan”.