Se agudiza crisis económica del PRD

Las elecciones del pasado 2 de julio no solamente dejaron al PRD marginado del mapa político mexicano, sino que también implicó una disminución del reparto de prerrogativas que por ley corresponden a los partidos políticos. Ante ello y con el primer mes del 2019 a punto de terminar, Ángel Ávila señaló que el PRD ha tenido que “prescindir” de su sindicato de trabajadores y está analizando mudarse prontamente a otro edificio, dejando las instalaciones de Benjamín Franklin 84.

El dirigente nacional del PRD declaró esta tarde que desde los primeros días de diciembre prescindieron del sindicato de trabajadores del partido. Comentó que acudieron a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje para realizar el procedimiento legal establecido para el tema de las liquidaciones correspondientes, después de considerar que sería irresponsable mantenerlos trabajando cuando no iban a tener el suficiente presupuesto para efectuar sus pagos.

Esta imposibilidad, dijo, se debe a que sus prerrogativas pasaron de significar el 12% del total de ellas a tan solo el 5%, además del compromiso que tienen para cubrir los gastos de 10 estados donde el PRD logró menos del 3% de la votación, los cuales antes tenían presupuesto propio y ahora pasaron a ser “una carga” de la instancia partidista nacional, teniendo que adoptar medidas drásticas.

Otras medidas que han tomado respecto al recorte del personal es adelgazar la burocracia partidista, pasando de 25 miembros en la dirección nacional a 5, más representante del partido ante el INE y el presidente del Consejo, además de mantener solo una secretaria por cada 25 de sus compañeros.

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Por si no fuera suficiente, señaló que se preparan para dejar el edificio de la colonia Escandón, ubicado en la calle Benjamín Franklin para trasladarse al inmueble de Monterrey 50. No obstante, este cambio no será de inmediato, dado que necesitan tiempo, dos o tres meses, para adecuar el edificio y verificar la seguridad del mismo ya que una de las construcciones vecinas está recargado sobre parte de su propiedad , necesitando entonces un peritaje de protección civil que les indique qué áreas son utilizables y habitables.

Ante la evidente “austeridad” forzada, surgió la pregunta para saber qué opinaba del supuesto gasto de 9 millones de pesos que habría significado el evento de toma de protesta de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en el Zócalo capitalino el pasado 1º de diciembre, el perredista señaló que sería insultante que un presidente que hace llamados a la austeridad, y criticaba los gastos suntuosos de la administración pasada, haya gastado esa suma de dinero.

Finalmente, añadió que de ser cierto ese dato, debería darse una explicación sin embargo no coincidía con el argumento de que la organización corrió a cargo de la administración saliente porque López Obrador se negó a ejercer una bolsa de 150 millones de pesos, de manera correcta, como parte de sus actividades de transición, por lo que resultaba incongruente que esta vez avalara un gasto de esa dimensión para un festival sin ningún beneficio social.