Papa Francisco, solo y bajo la lluvia, da bendición Urbi et Orbi

Durante un acto que no se había realizado fuera de sus lineamientos, el Papa Francisco otorgó, desde una plaza vacía en San Pedro, una bendición Urbi et Orbi para todo el mundo, actualmente asolado por la pandemia del coronavirus.

Este rito es un acto único que consiste en la bendición del Papa, misma que no puede ser realizada por otros obispos y padres y que puede ser emitida en medios de comunicación para pedir por el bien de los creyentes.

La bendición Urbi et Orbi, traducida del latín que significa “a la ciudad (Roma) y al mundo”, otorga la remisión por penas y pecados ya perdonados, confiriendo indulgencia plenaria bajo condiciones específicas del derecho canónico y por el catecismo de la iglesia.

El Papa sólo realiza esta oración al ser elegido sucesor de Pedro, en la Pascua y Navidad.

Además, hasta la fecha no se había registrado que esta bendición fuera realizada mundialmente para los creyentes que siguen a la institución a través de los medios de comunicación por lo que se le ha considerado un acto único en la historia.

Buscando dar apoyo a todos los fieles seguidores, el Papa Francisco había invitado a orar juntos este viernes 27 de marzo, a las 18 00 horas, tiempo de Roma, a través de las redes sociales en directo.

Pero la aparición del titular de la Iglesia Católica en una plaza vacía y azotada bajo la lluvia provocó comentarios de todo tipo por parte de los feligreses quienes en su mayoría confiaron en las peticiones del Papa Francisco a Dios para proteger al planeta ante la actual pandemia del coronavirus.

«Señor, bendice al mundo. Da salud a los cuerpos y consuela los corazones», detalló el Papa.

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