Mecanismo para el Acceso a la Verdad de la Guerra Sucia aclara que no contempla ninguna reivindicación a militares

El Mecanismo para el Acceso a la Verdad y el Esclarecimiento Histórico de las violaciones graves a los derechos humanos cometidas de 1965 a 1990 aclaró que no habrá por su parte ninguna reivindicación a militares caídos durante el periodo conocido como «Guerra Sucia». Esto luego de que en el inicio de los trabajos se anunciara que los nombres de militares fallecidos «por los hechos del pasado» serían inscritos en el Monumento a los Caídos de las Fuerzas Armadas.

A través de un comunicado, el mecanismo fundado para esclarecer el episodio de la «Guerra Sucia» en México negó que haya una reivindicación de los militares como parte de su plan de trabajo. Al respecto, señalaron que no es parte del mandato que ellos tienen el hacer un homenaje a miembros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a partir de la colaboración iniciada.

Según detalló, al momento se contempla realizar el reconocimiento, la búsqueda e investigaciones en los lugares e instalaciones militares en los que se presuma se hayan cometido violaciones graves a los derechos humanos. Asimismo, apuntó que buscan acceder y consultar repositorios, archivos y documentos de las distintas zonas militares y de distintas unidades de las fuerzas armadas.

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Adicionalmente, el mecanismo dijo que realizarán entrevistas y recepción de testimonios de personal de la Sedena que cuente con información referente a los hechos objeto del esclarecimiento histórico. A la par, tienen pensado recoger testimonios de personas víctimas de violaciones a derechos humanos en las instalaciones militares en las que presuntamente estuvieron en calidad de detenidas.

Finalmente, el mecanismo precisó que buscará consultar información sobre casos individuales de presuntas violaciones graves a derechos humanos entre 1965 y 1990. El comunicado está firmado por Eugenia Allier Montaño, Abel Barrera Hernández, David Fernández Dávalos, Aleida García Aguirre y Carlos A. Pérez Ricart, integrantes de la Comisión para la Verdad y la Justicia.

El pasado jueves, dio inicio la colaboración de la Comisión para la Verdad y Justicia por los Hechos entre 1965-1990 con la Sedena bajo la idea de reparar las graves violaciones a los derechos humanos. «El camino hacia la reconciliación se construye con verdad y justicia. Para ello requerimos que la Fiscalía General de la República acompañe este esfuerzo y reactive las 245 carpetas de investigación sobre la guerra sucia que hoy duermen el sueño de los justos, asumiendo que la principal reparación a las víctimas es que haya justicia en el país, que nunca más nadie sea perseguido por su forma de pensar, por sus convicciones filosóficas, su creencia religiosa, su preferencia sexual, su forma de vestir o por la música que escucha», dijo el subsecretario de Derechos Humanos y Migración, Alejandro Encinas.

Sin embargo, causó una serie de críticas que el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, cerrara su discurso señalando que «con orgullo» expresaba que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) le autorizó inscribir los nombres de militares fallecidos con motivo de los hechos del pasado en el Monumento a los Caídos de las Fuerzas Armadas. En tanto, justificó esta acción señalando que era un tributo y sentido homenaje a los soldados que cumplieron con su deber aún a costa de su vida.