Julio César Moreno, alcalde de la Venustiano Carranza, renuncia al PRD y pasa a Morena

Julio César Moreno, alcalde de la alcaldía Venustiano Carranza, renunció a las filas del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y se unió al partido Morena argumentando estar en contra del pragmatismo de la dirigencia nacional y la alianza “Va por México”.

Mario Delgado, presidente nacional de Morena, informó en sus redes sociales que Julio César Moreno dejó al PRD para formar parte del proyecto de la «4ta Transformación» ante la alianza que su partido hizo con el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN).

«Es tiempo de definiciones», escribió en sus redes sociales el excoordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, celebrando la nueva adhesión al proyecto de la ‘Cuarta Transformación’.

Minutos más tarde, el experredista compartió una carta en sus redes sociales justificando su decisión. En ella mencionó que el PRD le dio la espalda a los mexicanos y militancia por renunciar a sus causas e ideales de izquierda por anteponer «intereses mezquinos» de los dirigentes nacionales.

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Acusó que estos «secuestraron» al partido con su pragmatismo, silenciando con ello a los liderazgos partidistas locales y provocando la disminución de su presencia en la capital mexicana en 2018 pese a que era su bastión principal.

«La crisis que estamos viviendo, producto de la pandemia del Covid-19, nos obliga a que definamos qué proyecto de ciudad necesitamos apoyar», escribió y anunció que su salida no será individual, sino que con él partirán militantes y consejeros nacionales, estatales y municipales que integran el grupo que encabeza.

Ante la noticia, Jesús Zambrano, presidente nacional del PRD, calificó la decisión de Moreno Rivera como una incongruencia absoluta y traición a sus principios. Auguró que el perredismo en la alcaldía Venustiano Carranza prevalecerá y que triunfarán el próximo 6 de junio.

Asimismo, interpretó el «fichaje» como un acto de desesperación de Morena, sosteniendo que el partido oficial «compró» a su excompañero de partido debido a que se ven perdidos ante la fuerza electoral de la coalición de la que forman parte.