Hallan muerto a sacerdote desaparecido en Puebla

Fue localizado el cuerpo de Luciano Flores Sánchez, sacerdote de la Arquidiócesis de Guadalajara de 67 años, desaparecido el 15 de abril en Puebla.

El religioso fue reportado como desaparecido por sus familiares, cerca de la zona de San Hipólito Xochitenango, Tepeaca.

El obispo auxiliar de Puebla y obispo titular de Matamoros, Eugenio Lira Rugarcia, anunció la defunción a través de su cuenta de Twitter: «Con profunda pena y en la esperanza en la vida eterna que Jesús resucitado nos ofrece, la Arquidiócesis de Matamoros se une a la Arquidiócesis de Puebla por el sensible fallecimiento de P. Lucino Flores».

A su vez, el Estado del Vaticano publicó en su cuenta oficial la noticia. Exhortó al gobierno mexicano a investigar «exhaustivamente» el caso hasta aclarar los hechos, «conforme a la justicia».

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Roma también publicó la posición de los obispos mexicanos sobre el caso, quienes llamaron a poner un alto a la impunidad por este tipo de crímenes.

“Hacemos un urgente llamado para construir una cultura de paz y de reconciliación. Estos lamentables acontecimientos nos llaman a todos, a una conversión mucho más profunda y sincera», escribieron los religiosos en solidaridad. «Es tiempo de mirar con honestidad nuestra cultura y sociedad, para preguntarnos por qué hemos perdido el respeto a la vida, y a lo sagrado”.

El Vaticano mandó sus condolencias a la familia de la víctima y llamó a la comunidad católica a rezar por el alma del difunto.

La extraña versión de la Fiscalía

La Fiscalía de Jalisco reportó que el religioso fue encontrado la noche del viernes con impactos de bala en su cuerpo. Según esta versión, el sacerdote se encontraba en su parroquia (el viernes, cuando ya había sido reportado como desaparecido) cuando fue interceptado por dos hombres que lo acribillaron. Tras ser herido, habría sido llevado al hospital donde murió.

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