Ataques a transporte público ya “es problema de seguridad nacional”, advierten

La Unión Industrial del Estado de México (Unidem) advirtió que la reciente ola de ataques contra choferes y unidades de transporte público se ha convertido en un problema de seguridad nacional que, de complicarse aún más, podría traer «repercusiones letales para la recaudación y el empleo».

A través de un comunicado, el director general de la organización, Francisco Cuevas Dobarganes, subrayó que el problema adquiere tintes críticos debido a que el margen de agresiones contra transportistas es particularmente amplio en el área conurbada del Estado de México y la capital del país, donde se concentra más de una tercera parte del PIB nacional.

“El que este problema se esté extendiendo en algunas zonas de la Ciudad de México y sus zonas conurbadas, es ya un tema de seguridad nacional, ya que aquí se concentra más de un tercio del producto interno bruto nacional y ello se complica, tendría repercusiones letales para la recaudación y el empleo”, puntualizó Cuevas.

El director de la Unidem señaló que el elevado número de unidades incendiadas y choferes asesinados en fecha reciente son muestra de que «al menos una banda del crimen organizado» está recurriendo a un mecanismo de extorsión como principal fuente de ingresos, delito a que, añadió, se encuentra expuesta una gran parte del sureste mexicano y los países centroamericanos, y que ha contribuido a la actual crisis migratoria.

“Este delito pega directamente a la inversión y por ende al empleo, ya que desincentiva la actividad empresarial de cualquier región”, explicó Cuevas Dobarganes, y se refirió a la experiencia de ciudades como Juárez, Matamoros, Apatzingán y muchas comunidades del estado de Guerrero, donde «se ha caído dramáticamente la actividad económica» gracias a que la alta incidencia delictiva ha provocado el cierre de una gran cantidad de negocios.

«Este no es un tema regional o de partido y por ninguna circunstancia debería ser politizado, por el contrario todos los niveles de gobierno deben enfocarse para ‘extirpar’ este cáncer que han dejado crecer a niveles preligrosos», precisó la Unión Industrial.

Asimismo ratificó su solidaridad con el sector empresarial perjudicado y reiteró su llamado a todos los niveles de gobierno para que «no escatimen» recursos humanos, económicos y tecnológicos a su alcance para poner fin a esta problemática.