Fallece el cantautor argentino Alberto Cortez

Esta madrugada falleció Alberto Cortez en la ciudad de Madrid. El cantautor argentino murió en el Hospital Universitario HM Puerta del Sur, ubicado en la villa de Móstoles después de haber sido internado de emergencia el pasado 28 de marzo por presentar una hemorragia gástrica.

De acuerdo con los primeros datos filtrados, la salud del intérprete oriundo de La Pampa empeoró durante el día miércoles, terminando con una fulminante insuficiencia cardiaca que terminó con su vida a los 79 años de edad.

Alberto Cortez, cuyo nombre es José Alberto García Gallo, nació el 11 de marzo de 1940 en Rancul, localidad de la provincia de La Pampa en Argentina. A los 6 años inició su educación musical al acudir al conservatorio Alberto Williams, lo cual le permitiría iniciarse como compositor con 12 años de edad, momento de su vida en el que escribe «Un cigarrillo, la lluvia y tú».

6 años después ve la necesidad de mudarse a la provincia de Mendoza para continuar con su educación secundaria, lugar donde continuaría forjando su veta artística en el Conservatorio Chopin de San Rafael, localidad donde comenzaría a hacerse conocido con el paso de los años por comenzar sus primeros pasos como interprete y músico, sin embargo, su seudónimo surgiría durante su paso por la universidad en Buenos Aires, Argentina.

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Durante la primera mitad de la década de 1960, Alberto Cortez emprendería una serie de viajes a Europa como parte del «»Argentine international ballet and show» junto a un grupo musical, sin lograr los resultados esperados en Alemania e Italia, sin embargo, su primer disco («Sucu sucu») fue un éxito en Bélgica, lugar donde conocería a su esposa y España, y España, lugar en que se establecería la pareja después de concretar el matrimonio.

La fama internacional llegó al cantautor hasta el final de la década con el disco «El compositor, el cantante», con canciones como «Cuando un amigo se va», «El abuelo» y «Hay un Madrid» en 1969. Ese mismo año realizó su primera visita a México, comenzando a extender su éxito en España hacia Latinoamérica, el cual vio cuestionado en 1971 tras intentar presentarse en el mítico Luna Park de Buenos Aires, en donde no obtuvo el apoyo esperado. Ante ello, vuelve a México para estrenar su famosa canción «Mi árbol y yo», recorriendo el país y popularizando por este su trabajo musical.

El trabajo comenzó a ver algunos frutos de este lado del mundo, recibiendo su primer disco de oro por «Mi árbol y yo», recibiendo también un premio por parte del Heraldo de México y el «Micrófono de Oro» en el año de 1972, a partir de entonces, Alberto Cortez comenzaría a cantar en espacios de mayor capacidad que revistieron su carrera, como el Auditorio Nacional.

El «perdón» a Argentina se dio hasta 1978, año en el cual aceptó volver a dar un recital en su país de origen. A partir de ahí, su historia se resume en décadas de presentaciones exitosas, producto de giras en Chile, Perú, Venezuela, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, México, Argentina y Estados Unidos, en donde actuaría en el Carnegie Hall, escenario que data del año 1891.

Dentro de sus giras se destacan las realizadas con el también fallecido compositor Facundo Cabral bajo el nombre de «Lo Cortez no quita lo Cabral».

Alberto Cortez deja una memoria musical con éxitos que van desde los conocidos «Mi arbol y yo», «Te llegará una rosa», «A partir de mañana», «Cuando un amigo se va», «En un rincón del alma», «Qué suerte he tenido de nacer» hasta la musicalización de poemas de Neruda, como el Poema 20, y de Miguel Hernández, como Nanas de la Cebolla, la cual también es interpretada por el cantautor Joan Manuel Serrat.