Tenor mexicano De la Torre canta en Múnich por centésima vez en Carmina Burana

El tenor mexicano Óscar de la Torre llegó a 100 representaciones como El Cisne de Carmina Burana, en una función la noche del jueves 15 de agosto en la Müncher Residenz de Múnich.
 
De la Torre, quien vive en Alemania desde hace poco más de una década, justamente debutó en Palacio de Bellas Artes en 2003 dando voz al canto del cisne que va a ser devorado, en la versión coral de Carl Orff de los poemas goliardos.
 
La hazaña del joven artista mexicano, también especializado en el repertorio belcantista fue, además, en un escenario al aire libre, donde antes se había tenido que soportar la lluvia.
 
El Münchner Residenz es el complejo cultural más importante de la ciudad bávara, donde Wolfgang Amadeus Mozart estrenó en 1781 su ópera Idomeneo.
 
La centenaria participación de De la Torre en la mayor obra coral de la historia de la música contó con el aval y la presencia de la Fundación Carl Orff, encargada de la preservación y difusión del legado del compositor.
 
Por su récord, el consulado de México en Fráncfort del Meno ha nombrado a De la Torre como Líder Mexicano en Alemania durante 2019.
 
La Orquesta del Festival de Venecia y del Coro Filarmónico de Fürstenfeld, bajo la batuta del búlgaro Nayden Todorov, completaron el elenco histórico.
 
Esta cantata escénica, de las más conocidas y montadas del repertorio clásico, está basada en una recopilación de manuscritos medievales hallados en el siglo XIX en un monasterio bávaro, el Convento Benedictino de Beuren, en el sur de Alemania.
 
Están conformados por 318 cantos -la mayoría de ellos profanos-rimados en latín, alemán culto y antiguo francés. Fueron hechos por monjes goliardos, eruditos desertores con conocimientos de poesía y música que plasmaron la ironía y la transgresión moral en sus versos.
 
La obra musical Carmina Burana (Cantos de Beuren, en latín) de Carl Orff está integrada por una selección de textos, y fue estrenada en 1937 en la Ópera de Fráncfort (del Meno). Consta de siete secciones e incluye coros, voces solistas y orquesta.
 
Forma parte de su Trilogía-Triumphs, de Carl Orff, integrada también por Catulli Carmina (1943) y el Triunfo de Afrodita (1953), ambas cantadas anteriormente por De la Torre, uno de los pocos artistas que ha tenido esta oportunidad, por dominar su complejidad interpretativa.
 
Óscar de la Torre inició su formación en la Escuela Nacional de Música de la UNAM y el Conservatorio Nacional de Música, en su natal México. En ese país ganó el Concurso Nacional de Canto Carlo Morelli y obtuvo el Diplomado en Arte Lírico de la Sociedad Internacional de Valores de Arte Mexicano, AC (SIVAM), que lo llevó a estudiar en la Metropolitan Opera House de Nueva York.

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Tomó clases con Montserrat Caballé, Eva Randova, Francisco Araiza y Joan Dornemann. En Alemania, donde viajaba con frecuencia para educarse, realizó cursos magistrales con Peter Schreier, uno de los grandes maestros de oratorio, en el Conservatorio Estatal de Música y Artes Escénicas de Stuttgart.
 
Durante una década perteneció a distintos grupos artísticos del Instituto Nacional de Bellas Artes de México, por ejemplo el Coro de Madrigalistas. Su debut en Europa fue en Croacia en 2005 con la ópera Mis dos cabezas piensan peor que una, del mexicano Juan Trigos.

En 2007 se mudó a Múnich para probar suerte y a los pocos días ya tenía contratos asegurados, tanto en Alemania como en Suiza. Su carrera está indiscutiblemente asociada a Carmina Burana: llegó a Europa como solista de esa obra y de inmediato obtuvo trabajo.
 
Curiosamente audicionó en Alemania para una producción monumental de la obra de Carl Orff que se presentó en 2008 en el Auditorio Nacional de la capital mexicana, dirigida por Leo Krämer. Luego de eso, el director alemán, quien considera a De la Torre un tenor “grandioso”, lo invitó al Festival Internacional de Música y Arte Sacro del Vaticano.