Senado aprueba en lo particular el Plan B en materia electoral

Tras una jornada maratónica con la que concluye la última sesión ordinaria del año en el Senado de la República, los legisladores aprobaron con 68 votos a favor y 52 en contra el dictamen de reforma del Plan B en materia electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador por lo que regresa a la Cámara de Diputados con las modificaciones para que lo vuelva a discutir.

Como lo hiciera en la votación en lo general, el coordinador de la bancada morenista, Ricardo Monreal Ávila, y el presidente de la Comisión de Estudios Legislativos segunda (una de las dictaminadoras), Rafael Espino de la Peña, votaron nuevamente en contra del dictamen que sí fue avalado por sus compañeros de grupo legislativo que rechazaron todas las reservas que ambos hicieron, sin siquiera discutirlas.

La iniciativa que modificó la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (Legipe), la Ley de Partidos Políticos, la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, y la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas, además de que se expide la Ley General de los medios de impugnación en materia electoral, así como el proyecto de Ley general de Comunicación Social General de Responsabilidades Administrativas, se avaló la llamada “cláusula de vida eterna” a los partidos pequeños con la que se permite transferir votos entre partidos de una coalición en caso de existir el riesgo de perder el registro.

Además, se avaló que los partidos políticos puedan conservar “su guardadito”, es decir, que puedan quedarse con los recursos públicos y privados remanentes que les hayan asignados para usarlos en subsecuentes ejercicios fiscales, pero para el mismo fin constitucional que les fueron asignados y no devolverlos a la Tesorería como estaba estipulado.

Te puede interesar: Senadores aprueban en lo general el Plan B de AMLO; Monreal vota en contra

Estos son los dos cambios que los diputados introdujeron “de último momento” a la iniciativa originalmente planteada por el presidente López Obrador, y a los que él se mostró en desacuerdo. Y por lo que la oposición reclama inconstitucionalidad pues afirman que para que la “cláusula de vida eterna” fue válida se tiene que cambiar la Constitución no solamente las leyes secundarias.

Sin embargo, sí se eliminó la modificación que habían hecho los diputados en el sentido de que si los partidos pequeños no alcanzaban el 3 por ciento de la votación nominal aun así conservarían el registro, por lo que sí se les cancelará, salvo que hayan conservado el registro como partido local en al menos la mitad más uno de los estados, es decir, en 17 entidades.

Con el aval también se disminuyeron las candidaturas migrantes, indígenas y afrodescendientes, y se compacta al Instituto Nacional Electoral para eliminar el exceso de empleados del Servicio Profesional Electoral, el cual se reducirá a solamente el 15 por ciento de los que existen actualmente.

Ayer, los consejeros del INE acusaban que también se contemplaba la eliminación de las 300 juntas ejecutivas distritales con las que dijeron “se pone en riesgo el sistema electoral”.

Llama la atención que el coordinador de Morena ya no subió a tribuna a defender sus 300 reservas que le hizo al dictamen.