Puebla, el ring de Morena contra Morena

Morena tiene a Puebla como ring. El premio de este combate es la gubernatura de Puebla o eso parece a simple vista, sin embargo, al ver quiénes están detrás de los contendientes a la candidatura de «Juntos Haremos Historia» pareciera que existe un trasfondo mayor.

Por un lado Yeidckol ha declarado abiertamente su apoyo a Miguel Barbosa para que vuelva a ser el abanderado de la «izquierda» [sic]. Por otro lado, aparece un «resucitado» Ricardo Monreal, quien estaría apoyando a Alejandro Armenta, quien además parece tener apoyo del resto de la bancada y parte de los actores locales que fundaron a Morena en esa entidad.

Monreal aparece ahora como el hombre clave de Morena en el Congreso de la Unión y desde el mismo ha criticado ciertos perfiles que hoy son impulsados en lo local, no solo en Puebla, por la líder de Morena. ¿Será que busque influir desde ese cargo en la política local de varios estados para afianzar su resurgimiento nacional? Quizá perdió la oportunidad de gobernar la CDMX pero hoy la meta podría ser más grande.

La estrategia de Orta y el efecto cucaracha

A pesar del inclemente sol mañanero, Sheinbaum y Orta realizaron la ceremonia en la que premiaron al policía Eduardo Mondragon García por frustrar un robo de 10,000 dólares a una mujer de nacionalidad china a las afueras del metro Consulado. Por cierto, ¿que hacía la Mujer asiática con 10,000 dólares (al cambio del día de hoy 195,000 pesos) en la Ciudad de México, todo en una bolsa de mano?

Acabado el momento de los discursos, y tras la presentación de los próximos jefes de cuadrantes, la jefa de Gobierno se negó a dar declaraciones (quIzá guardándose para sus 100 días de gobierno), pero el siempre afable Jesús Orta Martínez dio unas declaraciones que resultaron llamativas.

Sobre la aparente alza en los asaltos en transporte público, Orta dijo que éstos ya existían y lo que osa es que ahora “se están visibilizando”. Argumentó que hay mayor presencia policíaca y que si había más asaltos en los micros y autobuses de la CDMX, era porque los ladrones que ya no podían robar en una ruta, se fueron a hacerlo a otra. Es decir, que su estrategia desató el efecto cucaracha.