Pide asamblea de FCPyS “consultas” para aprobar invitación a “figuras políticas

La asamblea de estudiantes promovida por quienes tomaron la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM llegó a su fin esta tarde comunicando entre algunas de sus peticiones que las autoridades escolares consulten a la comunidad estudiantil la invitación de «figuras políticas» a su plantel.

Tras algunas horas de discusión, los asistentes a la asamblea estudiantil de la FCPyS exigieron a las autoridades escolares que de ahora en adelante se establezca un diálogo y se consulte al estudiantado «para cualquier medida o actividad relevante al uso de espacios estudiantiles (ponencias, diplomados, conferencias, etc.) por parte de figuras políticas, públicas y polémicas.

Esto como reclamo a la apertura de las puertas a Ricardo Anaya puesto que «ha sido señalado en investigaciones por corrupción y lavado de dinero» insistiendo en que representa a los grupos más conservadores de México y la tecnocracia neoliberal que «históricamente ha atentado contra conquistas sociales en pro del servilismo a intereses extranjeros».

Junto a ello recordaron que este no es el primer caso sino que tanto en esta administración como en la del ex director Fernando Castañeda se ha permitido dar cátedra a «actores de la corrupción nacional» como Carlos Imaz tras su episodio de «las ligas» junto a René Bejarano.

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Además de esto, la asamblea pidió a la directora de la Facultad, Angélica Cuéllar, que explique la ocupación de los espacios de la Facultad para beneficios o fines políticos e individualistas; la «pluralidad educativa» al alcance de toda la comunidad estudiantil y la democratización de la Facultad; transparencia del uso de los recursos presupuestarios; eliminación de costos de las actividades realizadas por la Facultad.

Finalmente, solicitaron la apertura al diálogo abierto de la directora una vez al mes con una comisión estudiantil y apertura de las sesiones del consejo técnico y universitario.

Sin embargo, advirtieron que la directora debe presentarse el próximo 9 de septiembre a la 1 de la tarde para responder a las exigencias y evitar así la toma del edificio G, de carácter administrativo hasta su debida respuesta.