Pese a la creciente violencia en México, la algarabía de se desató por el Bicentenario del inicio de la Independencia hace 11 años. Luego de pasadas las fiestas patrias con su polémica por el espectáculo mostrado en el Zócalo y la construcción de la ‘Estela de Luz’, un senador perredista propuso nuevamente incorporar a Agustín de Iturbide al Muro de Honor de la Cámara de Diputados.

El 5 de octubre de 2010, José Luis García Zalvidea, integrante de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) vio publicada en la Gaceta del Senado una iniciativa para reintegrar a Agustín de Iturbide al Muro de Honor de la Cámara de Diputados. “El único libertador latinoamericano que no es motivo de un reconocimiento por parte de los respectivos estados que independizaron del Imperio Español, es Iturbide”, reclamó en su argumentación.

Aunque aceptó que Iturbide propuso el establecimiento de una monarquía constitucional, este lo justificó diciendo que no por ello fue un traidor, ya que solamente deseaba el establecimiento de un imperio grande y fuerte en Norteamérica. Además, sostuvo que lo que buscaba el general realista era tener presencia comercial en el Golfo, en el Pacífico y en el Caribe, y que fuera respetado por las grandes naciones de la época.

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Por tener esa visión, consideró que fue el embajador de Estados Unidos en México, Joel R. Poinsett, quien ayudó a que se diera la muerte del consumador de la Independencia por no convenir a los intereses de su nación.

Finalmente, en su propuesta opinó que fue gracias al general criollo que México tuvo su bandera, su primer ejército regular e incluso un programa constitucional acorde a las circunstancias de los mexicanos. De esa manera, expuso sus razones por las que consideraba que se debía hacer un esfuerzo “desapasionado” y “objetivo” de la figura de Agustín de Iturbide y reconocerle su papel como fundador del Estado Mexicano.

El esfuerzo fue en vano. Su iniciativa no podía ser discutida en el Senado, motivo por el cual pasó a la Cámara de Diputados. Ahí estuvo congelada más de un año, hasta que por acuerdo fue una de las tantas en la Comisión de Régimen, Reglamentos y Prácticas Parlamentarias en el Recinto Legislativo que fueron desechadas el 13 de marzo de 2012 .