La austeridad más allá de AMLO

Andrés Manuel López Obrador no quiere seguridad personal (diciéndole adiós al Estado Mayor Presidencial), así como busca reducir la estructura de mando junto a sus sueldos (él mismo ganará la mitad que el actual mandatario); además planea quitar privilegios a servidores públicos, eliminar las pensiones de los expresidentes, ahorrar mediante gastos racionales, reorientar los recursos del gasto federalizado en proyectos de alto impacto económico y social en los estados y municipios, vender el avión presidencial, y acabar con la corrupción.

Ese es el plan de austeridad republicana que busca implementar Andrés Manuel López Obrador, el candidato ganador en las elecciones presidenciales del 1º de julio. Su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, incluso se rehúsa a ser llamada «primera dama» argumentando que se trata de una categorización clasista, ya que no cree que haya mujeres y hombres «de primera ni de segunda».

Pero no se trata del primer y último proyecto de nación, gabinete y mandatario que decide vivir bajos los principios de moderación y prudencia económica:

José Alberto ‘Pepe’ Mujica, con su pasado guerrillero en el que formó parte del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, se convirtió en diputado y senador, más tarde en ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (entre 2005 y 2008), y posteriormente en líder del Movimiento de Participación Popular, sector mayoritario del partido de izquierda Frente Amplio, con el que se volvió presidente de Uruguay.

Donó casi 90% de su sueldo para caridad y tiene un patrimonio de unos 200 mil dólares (aproximadamente 3 millones 800 mil pesos): una granja, dos viejos autos Volkswagen «escarabajo» y tres tractores. «Si tengo pocas cosas, necesito poco para sostenerlas», dijo a BBC en 2012.

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Xi Jinping fue uno de los fundadores de la guerrilla comunista que operó en el norte de China contra el Kuomintang. Más tarde, durante la Revolución Cultural y luego de trabajar en el campo, estudió ingeniería química en la Universidad Tsinghua, donde también obtuvo el doctorado en teoría marxista en la Escuela de Humanidades y Ciencias Sociales.

A pesar de haberse posicionado en contra del proteccionismo económico y seguir los principios del socialismo chino sobre una economía mixta, gana 39,720 dólares al año (aproximadamente 750 mil pesos), considerado uno de los sueldos más bajos de entre sus homólogos.

China además, se mantiene como la segunda potencia mundial buscando el reequilibrio de su economía, basado en reducir un excesivo enfoque hacia la manufactura e industria de bajo valor añadido para aumentar el peso del sector servicios; se le ha dado prioridad al desarrollo científico y tecnológico; y ha buscado impulsar una campaña anticorrupción.

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Evo Morales Ayma ingresó en el movimiento sindical en la década de 1980, en la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), y después junto a otros fundó el Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (IPSP) que se aliaría con el Movimiento al Socialismo (M.A.S.) para competir en las elecciones generales de 1997. Participó en las elecciones presidenciales como candidato en el 2002, pero fue en el 2005 cuando las ganó, convirtiéndose en el primer presidente indígena de esa nación.

Desde el 2015, Morales tiene un salario de 3.085,7 dólares (aproximadamente 58 mil 600 pesos). Es el presidente que menos gana en Latinoamérica, y en su mandato se han llevado políticas públicas como: la bonanza económica, el salario de muchos funcionarios del gobierno y la administración se redujo en 57 por ciento, nacionalizó los hidrocarburos, impuso las empresas mixtas, y fomentó la alfabetización.

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Justin Trudeau, antes de convertirse en primer ministro de Canadá, fue a la Universidad McGill donde se licenció en Literatura Inglesa y a la Universidad de Columbia Británica donde obtuvo una licenciatura en Educación. En 2002 realizó estudios de ingeniería en la Escuela Politécnica de la Universidad de Montreal y de 2005 a 2006 estudió una maestría en geografía medioambiental en la Universidad McGill.

Al convertirse en mandatario de Canadá adoptó una política de tarificación del carbono, con un precio base para todo el país, dejando a cada una de las provincias establecer sus propios objetivos; buscó eliminar la publicidad gubernamental partidista; y buscó transparentar los gastos del gobierno y de sus funcionarios.

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