La Fiscalía General de Justicia de Ciudad de México (FGJCDMX) informó que investiga si los restos de un bebé hallados en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de San Miguel, en Puebla, Puebla, fueron sustraídos de un panteón de Iztapalapa, Ciudad de México (CDMX).

A través de un comunicado, la Fiscalía de CDMX informó la apertura de una carpeta de investigación, por parte del personal ministerial de la Fiscalía de Investigación Territorial en Iztapalapa, luego de que recibieran una denuncia del administrador de un panteón de la alcaldía Iztapalapa por la desaparición de un cuerpo.

Según relató el trabajador del panteón, una mujer se enteró que los restos de un menor de edad habían sido encontrados en un penal de Puebla. Ante eso, acudió al panteón acompañada de un hombre para verificar si su bebé estaba donde había sido sepultado; sin embargo, al excavar en el sitio los presentes pudieron constatar que el cuerpo del niño ya no estaba en su tumba.

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En las indagatorias estarán participando elementos de la Policía de Investigación de la FGJCDMX, así como personal especializado en criminalística, fotografía y química de la Coordinación General de Investigación Forense y Servicios Periciales . En tanto, la fiscalía encabezada por Ernestina Godoy Ramos anunció que integrará la denuncia a la investigación iniciada por noticia criminal en la Coordinación General de Investigación de Delitos de Género y Atención a Víctimas.

El 10 de enero pasado un interno del penal de San Miguel estaba manipulando un contenedor de basura cuando encontró el cuerpo de un bebé. Ante ello, alertó a las autoridades del Cereso para que respondieran a la situación. Al respecto, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, informó que la Fiscalía General del Estado ya abrió la carpeta de investigación correspondiente. Este comentó que se estaban indagando detalles sobre la procedencia, edad e ingreso a penal de los restos del niño; en tanto, resaltó que el cuerpo presentaba aparente una «operación» en el apéndice.

Por su parte, Sakia Niño de Rivera, presidenta de la organización ‘Reinserta’, la cual ha hecho contacto con la madre del menor sustraído en CDMX, señaló en Twitter la importancia de que las autoridades poblanas indaguen cómo entró a la prisión y para qué fue utilizado el cuerpo, ya que por la incisión existe la sospecha de que fue usado para ingresar droga.

Asimismo, la activista develó que el bebé encontrado en el penal de Puebla llevaba por nombre Tadeo y que murió el 5 de enero a causa de problemas intestinales. Tras ello, el 6 de enero fue enterrado en un panteón de Iztapalapa, cuatro días antes de ser encontrado en Puebla