Impulsa Conapred nueva campaña contra el racismo en redes sociales

El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) ha emprendido durante los últimos días una nueva campaña en contra del racismo en México, luego de una serie de denuncias de usuarios de redes sociales contra influencers y en el marco de las protestas en Estados Unidos tras el homicidio de George Floyd en Minneapolis, Minnesota.

A través del apoyo de actores, Conapred reforzó sus trabajos contra el racismo en México mediante el hashtag #DesaprendamosElRacismo, mediante el cual llaman a la población a reflexionar sobre cuándo han tenido actitudes racistas que socialmente han sido normalizadas en el lenguaje o como «bromas».

El primero en participar en la difusión de este fue el actor Tenoch Huerta, quien contó cómo cuando era niño y jugaba con otros percibiendo un «mal olor» estos decían que «olía a indio», por lo que llamaba a desaprender el racismo.

Roberto Sosa, conocido actor mexicano, también participó mediante un video diciendo que él ha sido racista cuando se ha detenido en un semáforo y ha ignorado la presencia de un niño que se ha acercado a él a pedirle dinero, ya sea subiendo el vidrio o sea volteando. «No se nace siendo racista, es algo que aprendemos, desaprendamos el racismo», menciona el histrión.

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Por su parte Santiago Pando, publicista político, tuvo su participación diciendo que ha sido racista en debido a que en el entorno en el que creció los indígenas eran vistos como personas atrasadas, primitivas e ignorantes, argumentando que el malinchismo es otra forma de racismo puesto que al analizar la raíz indígena que se tiene se puede descubrir, revalorar y dignificar la misma, resguardando mejor la herencia ancestral antes que demeritarla buscando algo diferente en el extranjero.

Durante la última semana, se ha criticado a otros personajes del espectáculo como a Bárbara de Regil dado que en uno de sus videos compartidos esta expresó «¡Ay, ¡qué prieta! ¡No, qué feo! » luego de poner un filtro que le oscurecía el rostro, sin embargo, el tema ha sido abordado de manera institucional por estudios como el del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), el cual el año pasado publicó un estudio en el cual se decía que el color de piel influye en México como una variable determinante en la movilidad social, concluyendo que quienes tienen un tono más oscuro experimentan menor movilidad ascendente y mayor movilidad descendente respecto a quienes tienen un tomo de piel más claro, especialmente en el norte del país.