Connect with us

Cultura

El origen del árbol navideño

árbol navideño origen
Foto: Twitter

Desde comienzos del mes de diciembre, las luces y árboles navideños empiezan a adornar las salas de los hogares mexicanos. Grandes, pequeños, naturales o artificiales, forman parte esencial del espíritu festivo de final de año, sin embargo, ¿de dónde viene la tradición? La Hoguera indagó al respecto.

El árbol de navidad tiene su origen en costumbres paganas, algunos historiadores aseguran que su inicio se puede rastrear hasta los celtas, quienes decoraban robles con frutas y velas durante los solsticios de invierno. El fin de estos rituales era asegurar el regreso del sol y la vegetación con la llegada de la primavera.

Estas costumbres fueron posteriormente adoptadas por el cristianismo en el siglo XVII después de los intentos de eliminar las prácticas paganas. Se le consideró «el árbol de Cristo», ya que representa el episodio del nacimiento de Jesucristo, hijo de la Virgen María.

Cabe mencionar que alrededor de una tradición tan antigua se han generado múltiples mitos y leyendas. Una de ellas, que es mayormente aceptada como verdad, es que el árbol navideño llegó a México gracias al emperador Maximiliano de Habsburgo.

En diciembre de 1864, las élites mexicanas acudieron al Castillo de Chapultepec para la celebración de las fechas. La residencia del monarca había sido adornada magníficamente con un árbol ataviado de colores, brillos y detalles. Si bien en un inicio fue tomado como una decoración inusual, no tardó en ser imitada y difundida en el país.

Empero, cuando el imperio llegara a su fin con el fusilamiento de Maximiliano en 1867, el folclore cayó en el olvido para ser recuperado casi diez años más tarde cuando el general Miguel Negrete colocó uno en su hogar influido por sus viajes a Europa y Estados Unidos.

Registros históricos aseguran que Negrete, enemigo político de Porfirio Díaz, había instalado un enorme pino, en el cual colocó hasta 250 regalos; uno para cada uno de los invitados a su cena navideña.

Otros datos curiosos…

Se cuenta que fue Martín Lutero, el teólogo, quien inició la tradición de colocar velas en las ramas del árbol pues intentaba simular el brillo de las estrellas en las noches de inverno.

Además fue en Estonia (1441) y Letonia (1510) donde se erigieron los primeros árboles de navidad en plazas públicas. En Riga, Letonia, el adorno se colocó en la plaza del mercado, decorado con rosas artificiales.

Publicidad


Síguenos en Facebook

Publicidad

Síguenos en Twitter

Recomendaciones