Condena CNDH violencia en Torreón y pide impulsar la educación en DDHH

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) condenó la violencia en el Colegio Cervantes de Torreón, en Coahuila, y llamó a las autoridades a impulsar la educación en Derechos Humanos (DDHH) como estrategia contra ese problema en las escuelas.

La CNDH subrayó que el asesinato de una profesora a manos de un alumno de primaria de 12 años, quien posteriormente se suicidó, evidencia la gravedad de la problemática que enfrenta el país en materia de seguridad y el Estado de Derecho, ya que las autoridades no han podido garantizar las condiciones de seguridad para la convivencia pacífica que permitan la vigencia de los derechos humanos en el país.

En el posicionamiento, la CNDH contradice la visión de “hechos aislados” como ha referido el gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, y el presidente municipal de Torreón al decir que esta violencia en las escuelas no es ocasional sino cotidiana y común manifestándose de distintas maneras, por lo que se debía impulsar la educación en DDHH para atender la violencia escolar con miras a fortalecer el respeto a la dignidad humana, la conciencia y la responsabilidad social.

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“Para esta Comisión Nacional, comprender la violencia en los centros educativos implica tomar en cuenta que existe una diversidad de prácticas violencias y de actores involucrados en un espacio que produce, legitima, promueve y transmite valores, creencias, normas, reglas y formas de ver el mundo que tienen impacto en la socialización de niñas, niños y adolescentes”, señala la institución dirigida por Rosario Piedra Ibarra.

La importancia de intervenir estos espacios, señala la CNDH, es que dicha violencia representa un obstáculo para la enseñanza y el desarrollo de las relaciones sociales, contribuyendo así al desarrollo de problemas psicológicos y afectando la integración social del alumnado implicado en dinámicas violentas.

Finalmente, la Comisión pidió que no solo queden las acciones en manos de las autoridades, sino que todos los integrantes de la comunidad estudiantil deben tomar un papel central en la construcción de un espacio pacífico.