Connect with us

Internacional

Colombia: de la gestación al paro nacional del 28 de abril

Foto: Twitter / IniciativaComun

Las imágenes de miles de personas marchando por calles de distintas ciudades de Colombia por el paro nacional llamaron la atención del mundo en el mes de abril; sin embargo, la fuerza de este movimiento tiene su origen uniendo varias demandas sociales debido a las condiciones que permean en ese país, siendo la reforma tributaria el impulso final.

El 16 de abril Alberto Carrasquilla, entonces ministro de Hacienda de Colombia, presentó ante el Congreso de ese país el proyecto de la ‘Ley de Solidaridad Sostenible‘, una reforma fiscal con la cual, apelando a la necesidad de más recursos para trabajar contra la pobreza impulsada por la pandemia, se buscaba recaudar hasta $23.4 billones de pesos.

“La gente mostró un descontento generalizado dado que estaba el alza al IVA, impuesto que está en productos de la canasta básica familiar, luego cambiaron esto. Dicha reforma tributaria se encargaba de sacarle el dinero de los bolsillos para solucionar las problemáticas sociales o de la solidaridad”, contó para La Hoguera David Galeano, estudiante de Ingeniería Sanitaria Ambiental y líder estudiantil de la Universidad del Valle en Cali, Colombia.

El participante de este movimiento comentó que el descontento también fue generalizado debido a que algo parecido ya había sucedido con una reforma en 2019; sin embargo, la gente no se interesó tanto en esa ocasión debido a que la ley no afectaría ampliamente a la población.

Imagen
Alberto Carrasquilla, entonces ministro de Hacienda de Colombia, junto a Iván Duque, presidente del país sudamericano, cuestionados por la Reforma Tributaria que llevó a convocar a un paro para el 28 de abril. Foto: Twitter

La reforma impulsada desde el gabinete de Iván Duque no solo trastocaba a los más desfavorecidos. Al gravar también servicios públicos como el agua, la electricidad, el alcantarillado o el internet, sin contemplar su mayor uso en esta pandemia, se tocó el bolsillo de la clase media. Esto causó que organizaciones comenzaran a manifestarse, detonando a la vez que la gente comenzara a sentir la sensación de salir a acompañar y respaldar estas protestas.

“La gente de Santiago de Cali físicamente aguantó el hambre durante los primeros meses de la cuarentena y después de la reactivación económica, no había recursos, no había inversión por parte del Estado, salimos a denunciar los estudiantes y nos reprimían”, cuenta el líder estudiantil narrando desde su inmediatez un fenómeno de impacto nacional.

La pandemia en Colombia, como en otros países, supuso un golpe a la economía de sus habitantes y, en este caso, aceleró el crecimiento de la pobreza. De acuerdo al Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), durante 2019 el país contaba ya con 17.4 millones de personas viviendo en la pobreza monetaria tras un repunte de 662 mil personas que pasaron a sufrir esta condición; no obstante, de pasar a representar aproximadamente el 35.7% de los 50.3 millones de habitantes que tiene, en 2020 la pobreza alcanzó, según cifras oficiales, a otros 3.6 millones para aumentar la situación al 42.5%.

«Colombia se ha caracterizado por ser uno de los países con menor inversión social durante la pandemia. A pesar de que el gobierno nacional haya sacado un recurso importante para subsanar este momento importante de la pandemia, no lo hemos visto. Entonces todo esto va sumando», comentó David detallando la situación económica de su país.

Los logros del movimiento estudiantil, en riesgo por la reforma tributaria

David explicó desde su experiencia inmediata cómo la reforma tributaria que proponía el gobierno tenía un impacto en los logros que el movimiento estudiantil obtuvo en defensa de los recursos para las universidades pública:

“En el caso concreto del movimiento estudiantil, nosotros tuvimos el último gran paro en 2018. El gobierno nacional tenía una deuda con las universidades públicas de 18 billones de pesos, una cantidad increíblemente inmensa, una deuda que año tras año incrementaba. Entonces con este paro sacamos una ganancia muy importante, aunque no suficiente, que era anualmente un incremento de recursos, lo cual representó un ingreso de más de 4 billones de pesos que iban a entrar a universidades públicas.

«Hasta el momento se nos venía cumpliendo, atropellado, un poquito peleado para que cumplieran, porque el gobierno siempre es así. Si no le han cumplido, por ejemplo, a las FARC, no le van cumplir a nadie más. Este año tuvimos la inyección, pero la misma reforma ponía en riesgo el dinero que entraría el próximo año”, detalló.

Te puede interesar: Reprimen a manifestantes y brigadas médicas en Cali, Colombia

Todos estos factores, aunados a la percepción de falta de protección de la economía de la población para priorizar la de entidades bancarias durante la pandemia, fueron lo que comenzaron a proyectar una movilización masiva, comenta David. Organizadas en el Comité de Paros Departamentales y la Comisión Nacional de Paro Nacional, las organizaciones sociales, de trabajadores y estudiantiles lanzaron la convocatoria de paro para el 28 de abril.

Invitación al Paro Nacional en Colombia del 28 de abril de 2020. Foto: Twitter

Las condiciones para una amplia participación ciudadanía parecían dadas. A un año de las elecciones presidenciales, el 82% de los habitantes declaraba que no votarían por un político que apoyara la reforma tributaria. La pedagogía se echó a andar. En calles y redes sociales los promoventes como David llamaban a manifestar el descontento generalizado días previos a la fecha establecida.

El día 28 de abril llegó y el paro tuvo un apoyo mayor al esperado. Miles de personas no solo caminaron en Bogotá, capital de Colombia, sino que otros centros urbanos salieron a marchar en contra de la reforma tributaria del gobierno de Iván Duque. “Se superaron las expectativas en Cali”, relató emocionado el líder estudiantil tras ver que la intimidación a estudiantes una semana antes tras la toma pacífica de la Ciudad Universitaria de Meléndez. No había sido suficiente para mantenerlos en su hogar pese al miedo mismo a la pandemia en medio de una nueva ola de contagios de COVID-19.

«Acá en Colombia siempre que se detonan este tipo de manifestaciones fuertes la que lleva la batuta es Bogotá […] pero lo que posiblemente analizamos que cambió es este tema de la pobreza acá en Cali, y que ha sido la ciudad más afectada de momento por el tema de la pandemia», agregó.

Fueron estas marchas las que inicialmente llamaron la atención a nivel internacional como ha ocurrido de manera similar en otros países de la región; sin embargo, las primeras movilizaciones que se tornaban pacíficas comenzaron a ser el objeto de las “fuerzas del orden” para reprimirlas, causando indignación y preocupación por los habitantes de ese país.

Primeras imágenes del paro el 28 de abril en Colombia. Foto: Twitter: Univalle

Publicidad


Síguenos en Facebook

Publicidad

Síguenos en Twitter

Recomendaciones