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Internacional

Capos mexicanos juzgados y presos en Estados Unidos

Chapo Guzmán es solo uno de los capos mexicanos que han sido extraditados y juzgados en Estados Unidos
Foto: Twitter

Esta mañana, en una corte federal de Brooklyn, Joaquín «El Chapo» Guzmán, fue declarado culpable de 10 delitos. El 25 de junio, a las 10 de la mañana, el capo mexicano recibirá la sentencia correspondiente; sin embargo, algunos medios de comunicación han manejado la versión de que recibiría cadena perpetua.

Desde el inicio de su administración, Donald Trump ha prometido que se endurecerán los castigos para quienes estén involucrados en delitos como el tráfico de drogas. No obstante, desde gobiernos anteriores se han pedido extradiciones a distintos personajes inmiscuidos en este mundo para llevarlos a juicio en cortes estadounidenses. A continuación, van algunos de los casos más sonados:

Alfredo Beltrán Leyva: Conocido como “El Mochomo», fue capturado en el año 2008 y extraditado a Estados Unidos durante 2014 donde fue juzgado por tráfico de drogas. Su proceso fue realizado en una corte del Distrito de Columbia, en donde fue condenado a cadena perpetua y el pago de una multa de 529 millones de dólares.

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Osiel Cárdenas Guillen: El líder del Cartel del Golfo fue extraditado en 2007 a Estados Unidos después de 4 años de permanecer en prisión en tierras mexicanos, tras ser capturado em Matamoros, Tamaulipas. El 24 de febrero de 2010, el Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció que Cárdenas, entonces de 42 años de edad, había sido condenado a 25 años de cárcel y al pago de una multa de 50 millones de dólares.

Édgar Valdez Villareal, «La Barbie»: En su momento, fue una de las capturas más «vitoreadas» por el gobierno de Felipe Calderón. El 30 de agosto de 2010 fue capturado, en plena efervescencia de las fiestas del Bicentenario de la independencia, en el municipio de Lerma, Estado de México. Este fue extraditado a Estados Unidos durante 2015 para ser juzgado en Atlanta, Georgia. El 11 de septiembre de 2018 fue sentenciado a 49 años de prisión y una multa de 192 millones de dólares.

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