Alertan por alta incidencia de diabetes en México

Nuestro país activó la alarma epidemiológica debido a que, por primera vez en la historia, hay seis millones 400 mil mexicanos que padecen diabetes;en otras palabras, una de cada 10 personas adultas padece la enfermedad crónico degenerativa, aseguró el presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, Elías Octavio Iñiguez Mejía.

El diputado panista, al inaugurar el foro “Quiero saber de Diabetes”, subrayó que la situación se torna alarmante, ya que 96 mil personas fallecen debido a la enfermedad.

“No se puede permitir que sigan muriendo personas a causa de diabetes, cuando sabemos que es prevenible. Estoy convencido de que es un asunto de corresponsabilidad», demandó el legislador. Sin embargo, enfatizó que la tarea de disminuir el número de decesos no sólo corresponde al Gobierno Federal, sino que también es responsabilidad de los connacionales hacer lo necesario para cuidarse.

El presidente de la Comisión de Salud explicó que la diabetes mellitus Tipo 2 representa el 90 por ciento de los casos, luego de que resaltara que darle un seguimiento y tratamiento a cada paciente diabético es prioritario, pero “genera una catástrofe para la economía del país”.

• Acciones para combatir la diabetes

El diputado dio a conocer que en el estado de Nuevo León se puso en marcha un proyecto para que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) baje la cuota a los empresarios a cambio de que sus empleados reduzcan sus índices de sobrepeso. Este programa se  quiere «replicar a nivel nacional; si se logra, el IMSS estará contento porque se reducirán los costos de consultas y los empresarios tendrán días más productivos y menos incapacidades”, detalló.

Ante el cuestionamiento sobre cómo funciona el programa, el legislador respondió que a los trabajadores se les tiene que pesar, obtener una media y en un mes se ven los resultados; «por cada kilo que bajen hay estímulos fiscales, lo mismo ocurre con los índices de glucosa».

Por su parte, la directora ejecutiva de la Federación Mexicana de Diabetes, Gisela Ayala, compartió siete hábitos que promueve la Federación: comer saludablemente, mantenerse activo, medir constantemente los niveles de glucosa, retos cotidianos, es decir, qué hacer cuando se baja o eleva la glucosa,así como seguir el tratamiento, actitud positiva y reducir riesgos de complicaciones.

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• Vivir con diabetes es caro

Abraham Ortega es un joven de 24 años que padece diabetes mellitus tipo 1 desde los 15 años de edad. Los costos de vivir con la enfermedad crónico degenerativa se hicieron presentes hasta hace unos meses en los que al egresas de la Máxima Casa de estudios, ya no es derechohabiente al servicio de salud proporcionado por IMSS.

«Tengo que comprar jeringas de una marca específica. Entre más fina y pequeña sea la aguja, menos dolor causa. A eso le agregamos Aarón que tengo que comprar tres cajas de tiras reactivas para medirme la glucosa antes y después de cada comida y también antes y después de hacer ejercicio. Cada caja cuesta entre 300 y 350 pesos», explica el joven.

«Y le agregamos también las insulinas que uso, porque soy insulinodependiente, que las insulinas que yo uso, por ejemplo, la lispro, 765 pesos en la farmacia San Pablo. Claro varia donde la compres, pero el precio oscila entre 750 y los 800 pesos. La insulina tiene sólo 10 mililítros en cada frasco».

Abraham también utiliza dos envases de insulina de acción intermedia isofána, cuyo precio oscila entre los 200 y 400 pesos por un frasco con 10 mililítros.

En promedio el joven de 24 años gasta poco más de 2500 pesos mensuales. «Vivir con diabetes es caro y peor tantito si estás desempleado, porque el título universitario y la cédula no me permiten encontrar un trabajo que me permita solventar estos gastos». El egresado de la UNAM recibe apoyo de sus padres y «a duras penas» buscan que él cuente con todos sus medicamentos para evitar una complicación, cuyo gasto se incrementaría por los cuidados que se requieren.

Aunque Iñiguez Mejía recordó que la Comisión que preside ha trabajado para que el tratamiento de quienes padecen diabetes Tipo 1 esté respaldado y cuente con todas las políticas públicas de prevención en el primer nivel de atención, hay muchos jóvenes como Abraham que no cuentan con este servicio. No saben a dónde acudir o qué institución les brinda el apoyo que requieren.

Por consiguiente, el legislador lanzó un llamado al Estado, para que esté más atento y encauzar más labores contra la lucha de la enfermedad.