AMLO y Ebrard cantan victoria en firma de las modificaciones del T-MEC

El presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó la firma del Protocolo Modificatorio del Tratado México-Estados Unidos-Canadá de libre comercio entre los equipos negociadores de las tres naciones. Tanto el primer mandatario como el canciller Marcelo Ebrard celebraron este como un triunfo político por la unidad de la región y de todo el continente americano, mientras que los representantes destacaron este como el “mayor acuerdo comercial del mundo”.

En Palacio Nacional y ante la presencia de invitados de las tres naciones, los equipos negociadores encabezados por Jesús Seade, subsecretario de Relaciones Exteriores para América del Norte; la viceprimera ministra canadiense Chrystia Freeland; y el representante comercial de EU, Robert Lighthizer, firmaron las modificaciones en materia laboral, normativas ambientales, mecanismos de resolución de controversias y protección de patentes de medicamentos biotecnológicos.

Previo a la firma, López Obrador y Ebrard sostuvieron llamadas telefónicas con el presidente estadounidense Donald Trump y el primer ministro canadiense Justin Trudeau por agradecerles su apoyo para llegar a un acuerdo y su respeto a la soberanía nacional. El primer mandatario celebró también el respaldo de todas las cúpulas que integran el Consejo Coordinador Empresarial, así como por las confederaciones sindicales que cobijaron la nueva reforma laboral.

“Algunos pensaban que iba a ser imposible llegar a este acuerdo, que no nos íbamos a entender en nada, que nos íbamos a pelear y miren lo que son las cosas”, dijo López Obrador. Mientras que Ebrard agregó que “las posiciones políticas cuando empezamos esta negociación parecieran decir que era muy difícil, casi imposible, tener un tratado tan pronto, satisfactorio para los tres países y, sin embargo, aquí está”.

A nombre de la delegación estadounidense, Lighthizer aseguró que el T-MEC es “el mejor acuerdo comercial de la historia”, destacando puntos como sus contemplaciones para los sectores de las manufacturas, los productos agrícolas y el comercio digital. Siendo acompañado por Jared Kushner, yerno de Trump, consideró un “milagro”, que los principales partidos de EU, así como los sectores empresariales y sindicales pudieran unirse para sacar adelante el acuerdo.

En tanto Freeland, quien a lo largo de su intervención habló en español, inglés y francés, aseguró que el T-MEC servirá para el desarrollo de los trabajadores de toda la región con miras a incorporarlos a la clase media, tildándolo como un acuerdo progresista. Agregando que el proceso de negociación representó una “crisis existencial” que, a veces, se tornó en un auténtico “drama existencial” para los canadienses.

López Obrador y Ebrard celebraron que este acuerdo significará que la región norteamericana convivirá no solo por ‘accidente geográfico’, sino por un diseño económico-comercial. Mientras el canciller proclamó “misión cumplida” tras el proceso de negociaciones que inició en agosto de 2017 para la renovación de original Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el primer mandatario enfatizó la unidad de las tres naciones y sus pueblos.

“Se logra la unidad de nuestro continente americano, la unidad de todos los países, los pueblos de nuestra América, de la América que vio nacer a Abraham Lincon y la América que vio nacer a Benito Juárez”, dijo López Obrador. Concluyendo que “tenemos este acuerdo con América del Norte sin dar la espalda a nuestra América. Esto es muy importante, es un asunto de relaciones económicas, comerciales, pero también de geopolítica”.

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