AMLO sobre la carta al rey de España: “hay más súbditos en México que católicos”

El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó, una vez más, haber sido él quien dio a conocer la carta que envió al rey de España en la que le solicita disculparse con los pueblos originarios por la Conquista. Comparando la reacción que este documento ha causado en ambos países, llegando al racismo y la xenofobia, con la que se generó con El Vaticano, habiendo enviado una misiva similar al papa Francisco.

Durante su conferencia de prensa matutina, López Obrador fue cuestionado sobre los comentarios hechos por Pedro Sánchez Pérez-Castrejón, presidente del Gobierno español, en los cuales catalogó como un error que la administración del primer mandatario hiciera pública la carta que envió al rey Felipe IV. Versión que rechazó de nueva cuenta, señalando que fue una filtración que pudo ocurrir al interior de cualquiera de estos países.

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“También envié la misma carta con otro contenido, porque no es lo mismo, aunque se actuaba, en aquél entonces, de manera conjunta la Corona y la Iglesia, pero envié, en otros términos, planteando lo mismo al papa, y no hubo la misma polémica, quizá porque el papa ya pidió perdón, ya lo hizo en Bolivia”, dijo López Obrador, quien ha calificado la respuesta de España como una sobrerreacción.

De nueva cuenta, el primer mandatario reiteró que él planea ofrecer una disculpa similar a los pueblos indígenas, poniéndose a sí mismo como ejemplo de su plan de reconciliación. “La política, y sobre todo el poder, es humildad, no es prepotencia, no es arrogancia, no es mentalidad colonizadora, es ponernos todos en igualdad de circunstancias. Tenemos que ir hacia allá, nosotros tenemos y lo vamos a hacer”, puntualizó.

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Bajo este argumento, López Obrador también señaló las críticas que ha recibido desde el interior de México por parte de sus detractores. “me llamó mucho la atención que entonces hay más súbditos en México que católicos. No, es la parte política, es la parte ideológica. Entonces, vamos a serenarnos, vamos a ver las cosas con tranquilidad y, lo más importante de todo, la reconciliación”, añadió el primer mandatario.

De igual manera, volvió a mencionar que su solicitud destapó situaciones reales que se encontraban escondidas, poniendo como ejemplo la respuesta de la sociedad española que ha rayado en extremos como el racismo, o en algunas de las que han ocurrido en México, las cuales consideró como xenofóbicas. Por lo que insistió en que, en el fondo, es algo bueno que salgan a relucir estas condiciones para poder superarlas.

En cuanto al origen de la filtración, de acuerdo con él, pudo ocurrir en España o, en dado caso de que fuera en México, habría significado extraer el documento de la Secretaría de Relaciones Exteriores o, incluso, de Palacio Nacional. Aunque reconoció que esto significaría un delito, descartó que existiera fuego amigo al interior de su administración “hay unidad, estamos trabajando de manera conjunta. También hay libertades, no es obligar a nadie a tener una postura. Este es un gobierno de mujeres y de hombres libres, pero claro que hay coincidencias”.