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Internacional

Miembros del gobierno de Trump pagan el precio de la ‘tolerancia cero’

Foto: Twitter

La indignación que causó la ‘tolerancia cero’ de Donald Trump en la frontera se siente incluso al interior de Estados Unidos donde miembros de la administración presidencial han tenido que pagar los platos rotos por la estrategia que terminó separando a niños de sus familia bajo el argumento de la seguridad nacional.

Sarah Huckabee Sanders fue el más reciente objetivo del enojo colectivo contra la administración Trump. La vocera de la Casa Blanca se encontraba cenando el The Red Hen, un restaurante de Lexington, Virginia, cuando la dueña del establecimiento le pidió que se retirara del establecimiento.

Huckabee confirmó el incidente en su cuenta oficial de Twitter diciendo que la dueña le pidió salir del restaurante debido a que ella trabaja para Trump. La vocera se mostró molesta con los hechos ya que, aseguró, «siempre actúo de la mejor manera para tratar a los demás con respeto, en especial con quienes tengo desacuerdos, y seguiré haciéndolo».

Este es el cuarto incidente de este tipo en una semana ya que la noche del miércoles Kirstjen Nielsen, secretaria de Seguridad Nacional de Trump, fue a cenar al restaurante MXDC Cocina Mexicana, en Washington D.C., donde varios detractores de la tolerancia cero la reconocieron. Entre otras cosas Nielsen negó que los niños fueran separados de sus familias, que fueran metidos en jaulas y, finalmente, defendió las acciones argumentando ‘seguridad fronteriza’.

Interpretando como una provocación su presencia en un restaurante de comida mexicana mientras la controversia de los niños se desarrollaba varios protestantes rodearon su mesa para lanzar críticas en su contra y la de Trump. Mientras Nilsen comía, cabizbaja, un plato de guacamole, los miembros del servicio secreto que la escoltaban eran la única barrera entre ella y los manifestantes que coreaban «¡Vergüenza, vergüenza!».

El viernes por la mañana otro grupo de manifestantes se congregó afuera de la casa de Nielsen con pancartas coreando «¡Sin justicia no hay descanso!» y «¡Si los niños no duermen tú tampoco!». El incidente fue cubierto por la cadena Fox News, simpatizante de Trump y el Partido Republicano, que catalogó esto como un ataque a la privacidad de Nielsen.

Stephen Miller, asesor de Trump a quien se le acredita la idea de la tolerancia cero, vivió un incidente similar, aunque mucho más ligero, en otro restaurante de comida mexicana. La noche del domingo Miller cenó en Espita Mezcalería donde los comensales lo llamaron un ‘fascista’ e, incluso, uno le preguntó si pediría donaciones para nuevas jaulas donde poner a los niños migrantes.

Llantos de niños separados de sus familias inundan la Torre Trump

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