Metrópoli
Muestra Morena músculo en Coyoacán
Morena mostró músculo en un bastión perredista: Coyoacán, donde el ex delegado y legislador Mauricio Toledo es acusado de cacique. Con una voz que ya denota el cansancio y el uso constante del micrófono, María Rojo, candidata a la alcaldía de la demarcación que gobernó de 2000 a 2013, durante la gestión de Andrés López Obrador en el gobierno del entonces Distrito Federal, relató ante los asistentes al mitin las amenazas y agresiones de que han sido objeto ella y demás candidatos de Morena.
En una tarde nublada y fresca, asistentes y simpatizantes de Morena lanzaron rechiflas al escuchar el apellido del ex delegado, a quien responsabilizan, entre otras cosas, de permitir la construcción indiscriminada en esta que será una de las 16 alcaldías de la Ciudad de México.
Luego de los discursos de Martí Batres, candidato al Senado; María Rojo y Claudia Sheinbaum, aspirante al gobierno de la Ciudad de México, tocó el turno a López Obrador, quien bromeó sobre su dificultad para hablar de corrido.
Así se comenzó a llenar el jardín Hidalgo, en el centro de #Coyoacán, en espera de la llegada de AMLO (@lopezobrador_ ).
El ambiente es festivo. Hay familias, niños, jóvenes y bastantes personas mayores pic.twitter.com/hRK6qUZu47— LaHoguera_Mx (@LaHoguera_Mx) 7 de mayo de 2018
En una especia de diálogo, López Obrador enunciaba las propuestas sobre el apoyo a discapacitados, ancianos, a estudiantes, reactivación de la producción de gasolinas, respeto a las libertades, incluida la sexual, y prometía que no decepcionaría a quienes lo favorezcan con el voto el primero de julio.
Los asistentes escuchaban atentos y sólo uno que otro lanzaban gritos, ya sea para externar su apoyo o repudiar a personajes nombrados por el candidato de la coalición Juntos Haremos Historia.
Después de repetir que no va a vivir en Los Pinos y contar que se cambiará de casa cuando su hijo menor, Jesús, termine la primaria, en 2019, los asistentes lo animaban a decidirse por Coyoacán.
El discurso de poco más de media hora compensó a quienes esperaban la llegada de López Obrador desde las 17 horas, cuando debía iniciar el acto, que comenzó pasadas las 18 horas.
Antes de la llegada del tabasqueño la multitud se emocionó al advertir el arribo de un contingente, pero no se trataba de AMLO, si no de María Rojo, la candidata de Morena a la alcaldía de Coyoacán. La inquietud dio paso a gritos, porras y al constante grito: presidente, presidente.
El ambiente era festivo. Se dieron cita familias, niños, jóvenes y bastantes personas mayores.
La presentadora, cuya voz aguda arengaba a los presentes a repetir “es un honor estar con Obrador”, finalmente tuvo que sumarse al grito dominante: presidente, presidente.
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