A un mes, no hay rastro de los universitarios desaparecidos en Jalisco

Las autoridades de Jalisco siguen sin tener rastro de los tres universitarios que fueron ‘levantados’ hace un mes en Tonalá. Aristóteles Sandoval, mandatario estatal, aseguró que su administración no descansaría hasta encontrarlos. Pero también ha reconocido que la violencia e inseguridad no han ido a la baja durante su gobierno.

Javier Aceves Salomón Gastelum, Marco Ávalos y Daniel Díaz, estudiantes de cine de la Universidad de Medios Audiovisuales, fueron secuestrados la madrugada del 19 de marzo en el municipio de Tonalá. De acuerdo con una prima de Javier, quien estuvo presente, la caravana de autos en la que viajaban se detuvo al costado del nuevo Peroférico cuando el vehículo de los universitarios sufrió una descompostura.

La joven dijo que de otro vehículo descendieron hombres con armas largas quienes se identificaron como agentes de la Fiscalía General del Estado y les ordenaron agacharse. Cuando ella y sus demás compañeros alzaron la mirada, el comando había desaparecido con los tres estudiantes.

Menos de dos semanas antes, el 7 de marzo, Arisóteles Sandoval reconoció el incremento en los índices delictivos en Jalisco. «Vienen días difíciles, no les miento, la ola de violencia no se va a terminar», dijo el gobernador emanado del Partido Revolucionario Institucional al entregar equipo a policías municipales.

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Empezando el último año

Sandoval terminará su mandato constitucional el próximo 6 de diciembre cuando su sucesor tome procesión. Al empezar su último año los registros de violencia en Jalisco rompieron récords históricos. Al día 5 de marzo ya se contabilizaban 353 homicidios, superando la cifra de más asesinatos en un primer trimestre desde que se llevan registros en el estado.

El gobernador responsabiliza a las organizaciones criminales que se disputan el territorio estatal del incremento en la violencia, las desapariciones y los homicidios. En particular, ha señalado a la disputa entre los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación como el detonante de esta situación. Los líderes de ambas bandas componen el ‘top tres’ de fugitivos más buscados por la DEA, la agencia antidrogas de Estados Unidos.

En el mismo evento del 7 de marzo Sandoval dijo que su administración se había visto obligada a tomar las policías municipales de Tecalitlán, Autlán, Ocotlán, Villa Corona, Villa Puricifación y Unión de Tula. Esto debido a que sus elementos habían sido infiltrados por el crimen organizado. Cuatro días después, el 11, la policía estatal, federal y el Ejército repitieron la misma acción en Tlaquepaque.

Sandoval puso a la Fiscalía General de Jalisco y a la Fiscalía de Derechos Humanos a atender la desaparición de los universitarios, con escasos resultados. Ante la epidemia de ‘levantones’ en el estado, el pasado 16 de abril designó a José Raúl Rivera como titular de la Fisclaía Especializada en Personas Desaparecidas.

Luego del nombramiento la Comisión Nacional de Derechos Humanos y la Comisión Estatal de Derechos Humanos del Estado de Jalisco exigieron frenar la impunidad que caracteriza los casos de desaparición forzada. Así como hicieron un llamado a instaurar un Sistema Nacional de Búsqueda de Personas que cuente con una comisión en el estado.

Sandoval ofrece 1 mdp por información de universitarios desaparecidos

El hartazgo del pueblo

Tres días después de la desaparición de los cineastas, la comunidad universitaria de Jalisco tomó las calles para exigir la aparición con vida de sus compañeros. Con la consigna de #NoSonTresSomosTodxs estudiantes de la Universidad de Guadalajara, el Instituto Tecnológico de Educación Superior de Occidente y demás instituciones del estado marcharon desde la Universidad de Medios Audiovisuales hasta la glorieta de los Niños Héroes.

Además de las manifestaciones, figuras internacionales se han sumado a la exigencia. El primero de ellos fue Guillermo del Toro, originario de Guadalajara y recientemente galardonado con el Premio de la Academia en Estados Unidos.

Posteriormente, encabezados por el también ganador del Oscar Alfonso Cuarón, cineastas, académicos e instituciones especializadas de México y América Latina mandaron una carta a Sandoval y al fiscal general Raúl Sánchez Jiménez donde se suman al reclamo generalizado.

Incluso la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas hizo pública su solidaridad con los universitarios desaparecidos y pidió a las autoridades actuar con rapidez para encontrarlos con vida.

La juventud desaparecida

El 22 de marzo Sandoval emitió una lista de 5 universitarios desaparecidos en el estado, tres de ellos los cineastas de la UAAV. Los otros dos, César Ulises Arellano y Susana Carolina Gutiérrez, estudiantes de la Universidad de Guadalajara. El gobernador aseguró que su administración «no descansará» hasta encontrarlos con vida.

Un días después, Susana Gutiérrez fue encontrada por la Fiscalía de Jalisco y, de inmediato, se le reunió con sus familiares. El 25 de marzo el cadáver de Ulises Arellano fue encontrado en la barranca de Huentitán. De acuerdo con los estudios periciales y evidencia que se fue sumando a la investigación, el estudiante de 18 años se quitó la vida.

Aunque no se incluyó en el listado de Sandoval, Pedro Ruiz Guerrero fue reportado como desaparecido el 20 de marzo. El estudiante de secundaria, de 14 años de edad, fue encontrado cuatro días después sin que las autoridades dieran más información sobre el caso.

El 8 de abril se reportaron las desapariciones de José Armando Pérez, Juan Rubén Torres y Francisco Javier Barajas. Luego de ser localizados el día 11, con muestras de abuso físico, se confirmó que fueron privados ilegalmente de su libertad.

Ligan a proceso a los 4 policías acusados de desaparecer a 3 italianos

Los italianos

Las desapariciones forzadas en Jalisco han cobrado relevancia internacional desde finales de enero, cuando los ciudadanos italianos Raffaele Russo, su hijo Antonio y su sobrino Vicenzo Cimmino, fueron detenidos por autoridades municipales de Telcalitlán.

De acuerdo con Francesco y Daniele, otros dos hijos de Raffaele y quienes se encontraban en la Ciudad de México, sus familiares fueron detenidos por agentes municipales. Pero, al pedir información al respecto, las mismas autoridades negaron haber tenido contacto alguno con los italianos.

El caso creció en Italia, donde familiares de los Russo encabezaron marchas y manifestaciones en su ciudad natal de Nápoles. Ante el silencio de las autoridades mexicanas, el Ministerio de Relaciones Exteriores italiano se comunicó con el canciller Luis Videgaray para pedirle acciones al respecto.

La insistencia continuó durante el mes de febrero hasta que la Fiscalía de Jalisco vinculó a proceso a 4 policías de Tecalitlán por la desaparición de los Russo. Los agentes confirmaron haber vendido a los italianos a una banda de crimen organizado por mil pesos o «43 euros de mierda», como reclamaron los familiares de las víctimas en Italia. A los cuatro policías se les dictó formal prisión y enfrentan una pena de hasta 60 años de cárcel por el delito de desaparición forzada.

Hoy, 19 de abril, se cumple un mes del levantón de los universitarios. Pese a que Sandoval dijera en diferentes ocasiones que están agotando todas las líneas de investigación y pronto darán información sobre el caso, tal como sucedió con los tres italianos, no hay rastro alguno de los desaparecidos.