El gobierno federal, a través de la Secretaría de la Función Pública (SFP) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), presentó su plan de austeridad para el Instituto Nacional Electoral (INE) a fin de que tenga recursos para realizar la consulta de revocación de mandato.

La oficial mayor, Thalía Concepción Lagunes Aragón, expuso que con una serie de medidas de austeridad el INE podría contar con 2,972 millones de pesos (mdp). Según detalló, el instituto dirigido por Lorenzo Córdova podría tomar primeramente dinero de dos fideicomisos de los que es el fideicomitente.

Al respecto, la funcionaria dijo que el gobierno federal estimó que en el «Fondo para atender el pasivo electoral del INE» y el «Fondo para el cumplimento del programa de infraestructura inmobiliaria y para la atención ciudadana y mejoramiento de módulos del INE» hay disponibles 868.7 mdp tras el cierre dele ejercicio 2021.

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Asimismo, expresó que habrá la posibilidad de ahorrar 718.8 mdp en sueldos y salarios y 1,384.5 mdp en sus gastos de operación, por lo que ya tendrá los recursos suficientes para organización la revocación de mandato.

En cuanto a sueldos y salarios, el subsecretario de Egresos de la SHCP, Juan Pablo de Botton, recomendó aplicar el nuevo tabulador de sueldos y salarios para servidores de mando y enlace; suprimir pagos para seguros de gastos médicos mayores; y la cancelación de separación individualizada de mandos medios y superiores.

Dichas medidas, resaltó, no estarían afectando al personal operativo ni sindicalizado. Además, tampoco implicaría la reducción de plazas de ningún tipo.

Asimismo, el subsecretario indicó que el INE tiene aprobados 4,526.5 mdp para sus gastos de operación, de modo que podría ahorrar el 15% si aplica una reducción en lo invertido para telefonía, arrendamientos, combustibles, viáticos, equipo de telecomunicaciones y papelería.

Por último, el titular de la SFP, Roberto Salcedo, declaró que la base para realizar esta propuesta es lo hecho por el gobierno federal para combatir el dispendio, la suntuosidad y la frivolidad a expensas del erario. Este destacó la reducción de la estructura de los entes públicos; sin embargo, aseguró que la generación de ahorros no ha comprometido ni los objetivos nacionales ni las metas institucionales.