Con iniciativa preferente, AMLO busca reformar industria eléctrica

El presidente Andrés Manuel López Obrador envió una iniciativa preferente para reformar la Ley de la Industria Eléctrica como parte de lo que denomina ‘nueva política energética’. La propuesta, que arribó hoy a la Cámara de Diputados, plantea modificar el sistema de despacho que, acusa, fue diseñado para dar grandes privilegios a los productores de la iniciativa privada, a costa de la Comisión Federal de la Electricidad.

“La nueva política energética demanda ajustes a la Ley de la Industria Eléctrica. El sistema de despacho de los generadores eléctricos, impuesto a través de la emisión de dicha ley, es uno de los mecanismos destinados a establecer grandes privilegios a la generación privada, con grave perjuicio a la CFE. Reformarlo es el imperativo que motiva la presentación de la siguiente iniciativa”, se lee en la iniciativa preferente firmada por el primer mandatario.

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La propuesta es dar prioridad a la producción de las plantas hidroeléctricas de CFE, la cual subiría primero al sistema nacional. Le seguirían otras plantas de la empresa paraestatal que utilizan la energía nuclear, geotérmica, termoeléctrica o los ciclos combinados para su producción. En tercer término, se despacharía la producida por plantas eólicas o solares de la iniciativa privada. El último segmento correspondería a las centrales de ciclos combinados de empresas particulares.

También se eliminaría la obligación de compras por subasta para el Sistema Eléctrico Nacional y se ordenaría a la Comisión Reguladora de Energía revocar los permisos de autoabastecimiento obtenidos por acciones fraudulentas. Los permisos emitidos bajo la Ley de la Industria Eléctrica se deberán apegar a los criterios de planeación emitidos por la Secretaría de Energía y los certificados de energías limpias no dependerían de la propiedad o fecha de operaciones comerciales.

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Para esto, también se revisaría la legalidad y rentabilidad para el gobierno federal de los contratos de compromiso de capacidad de generación y compraventa de energía eléctrica suscritos con productores independientes. Siendo que, en repetidas ocasiones a lo largo de estos dos años de administración, López Obrador ha acusado que los contratos con empresas privadas emanados de la reforma energética de Enrique Peña Nieto afectan al patrimonio nacional y al erario público.

En total, el decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley de la Industria Eléctrica modificaría sus artículos 3, 4, 12, 26, 35, 53, 101, 108 y 126. Al ser una iniciativa preferente del Ejecutivo federal, la Cámara de Diputados tiene un plazo de apenas 31 días, es decir, hasta el próximo 3 de marzo, para discutir y votar la propuesta de López Obrador. En caso de ser aprobada pasará al Senado de la República con una estipulación similar.

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