Hay resistencia a la erradicación de la violencia política por razón de género: PAN

Adriana Aguilar, secretaria de Promoción Política de la Mujer del Partido Acción Nacional (PAN), apuntó que pese a las reformas para prevenir, sancionar y erradicar la violencia política por razón de género aún hay mucha resistencia de actores políticos, señalando que el diputado Gerardo Fernández Noroña es ejemplo de ello.

La funcionaria del PAN lamentó que existan resistencias de actores políticos a los trabajos y normas para eliminar la violencia política por razón de género, diciendo que desde la Presidencia de la República hasta las alcaldías presentan denuncias de resistencia por parte de políticos a respetar a las mujeres o promover el desarrollo laboral igualitario.

«Les cuesta mucho trabajo reconocer derechos a algunos compañeros, y por ello es necesario que la ley sea clara y firme, para que se sancione a quien no respete los derechos de las mujeres», expresó.

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Como ejemplo mencionó el caso de Gerardo Fernández Noroña, diputado del Partido del Trabajo (PT), quien por instrucción del Instituto Nacional Electoral (INE) recibirá una sanción de la Contraloría de la Cámara de Diputados por ejercer violencia política de género contra la diputada Adriana Dávila, integrante del PAN.

«No había eco de las autoridades, no había un camino claro de impugnación, porque aún la ley es vaga, pero gracias al INE se logró que el diputado acate la sanción por violencia política en razón de género”, dijo para reconocer a su compañera de partido por confrontar al legislador, convocando a las demás ciudadanas a denunciar cualquier acto de este tipo para que los abusadores no queden impunes.

El 8 de octubre de 2018, Juan Carlos Romero Hicks, coordinador del grupo parlamentario de Acción Nacional, expuso que el diputado petista había visitado a Tlaxcala y en un evento declaró «Me comentan que hay una diputada, que fue senadora y que está vinculada a este tema y que es más bocona que la chingada. No sé si sea cierto o no, pero en Tlaxcala siguen los problemas, pásenme elementos para ponerle una chinga la próxima vez que abra la boca», frase que condenó por tratarse de expresiones misóginas contra una de sus compañeras.

En esa ocasión, Adriana Dávila manifestó también su molestia y acusó que el diputado estaba comenzando a caracterizarse por atacar principalmente a mujeres, además de que sus comentarios habían estado subiendo de tono ignorando la gravedad y el alcance que pueden tener. Ante dicha situación, diputadas como Verónica Juárez, del PRD, Lucero Saldaña, del PRI, y Martha Tagle, de Movimiento Ciudadano, en representación de sus partidos, la respaldaron en su posicionamiento.