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Sólo 13 estados cobran impuestos ambientales; en 2023 prevén recaudar mil 640 millones de pesos

Foto: Designer Microsoft

Pese a que en todas las entidades federativas hay industrias que emiten contaminantes a la atmósfera o empresas con grandes flotillas de vehículos, solamente 13 estados del país pagan alguno de los cuatro impuestos ambientales, los cuales prevén que al cierre de 2023 se obtenga un ingreso por más de mil 640 millones de pesos.

Durante el Primer Encuentro de Recicladores organizado por la Asociación Nacional de la Industria del plástico, A.C. (Anipac) en colaboración de PetStar (la planta recicladora de PET grado alimenticio más grande del mundo), el gerente de Unidad de Ciateg, un centro de investigación, Emilio Munguía Ponce, explicó que son apenas los estados de Baja California, Campeche, Coahuila, Durango, Guanajuato, Estado de México, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, Yucatán y Zacatecas quienes pagan alguno de los cuatro contribuciones.

Los impuestos que se pagan son por extracción de materiales del suelo, subsuelo, pétreos y minerales; por emisión de gases a la atmosfera (siendo este el más común); por emisión de contaminantes al suelo, subsuelo y agua, y finalmente por depósito o almacenamiento de residuos y siendo Zacatecas el único que cobra los cuatro.

De acuerdo con el especialista, cada estado tiene facultades para legislar sobre los impuestos ambientales que desea cobrar, pero únicamente estos 13 lo han hecho. Detrás de Zacatecas, se encuentran Nuevo León y Querétaro con tres impuestos que fiscaliza, según su Ley de Ingresos para este 2023.

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De ellos, Munguía Ponce destaca que Zacatecas proyecta cerrar el año con 350 millones de pesos recaudados por concepto de los cuatro impuestos ambientales; en tanto que Querétaro 303. 2 millones; Nuevo León con un poco más de 400 millones; Yucatán 150 millones, y Guanajuato con 100 millones aunque no especifica cuando por cada uno. El resto cuenta con sumar menos de 100 millones, pero destaca el caso del Estado de México que proyecta una recaudación de 85 millones de pesos por únicamente el cobro del impuesto de emisión de gases a la atmósfera, por la cual contempla un costo de apenas 43 pesos por tonelada emitida.

Pese a que las entidades esperan tener esa recaudación, el especialista advierte que el pago por la emisión de gases a la atmósfera es “voluntario” y esto se hace principalmente haciendo un cálculo del consumo de luz a través del recibo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y de la carga de combustible a los vehículos de las empresas.

Ante ello, el gerente de unidad del Ciateg advierte que en un corto plazo las autoridades estarán regulando el pago de los impuestos ambientales, por lo que hizo un llamado al sector empresarial a disminuir la contaminación porque la recaudación les empezará a representar un gasto importante si no adecúan sus instalaciones eléctricas, por ejemplo, o empiezan por eficientear sus consumos, además del imparto que están ocasionando al medio ambiente, el cual no tendrá retroceso.

“Nos estamos adelantando a nuestro tiempo. Si no actuamos vamos a estar en una situación crítica como la del agua o la energía. Debemos tomar medidas urgentes desde nuestras trincheras”, dijo en relación al aumento en el calentamiento global de 1.7 que dio a conocer la semana pasada la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

La ONU reiteró su llamado a disminuir las emisiones en al menos 28 por ciento para evitar llegar a los 2.0 grados Celsius a nivel mundial y continuar con el Compromiso de París, firmado por los países, de bajar a los 1.5 grados, pero para ello la brecha cada día se extiende más, pues actualmente se deberían disminuir las emisiones en 42 por ciento para lograrlo.

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