Sheinbaum firma ‘compromiso de paz’ de la iglesia, pero con diferencias

La candidata presidencial de la Cuarta Transformación, Claudia Sheinbaum Pardo, al igual que lo hicieron sus contrincantes políticos, firmó el documento de ‘compromiso de paz’ al que convocó la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), pero lo hizo con una nota en la que señaló no estar de acuerdo con algunas afirmaciones que hace la iglesia católica con respecto a la situación actual que vive el país en materia de seguridad.

Por ello, la candidata de la izquierda comenzó diciendo que sí firmaría el documento porque tiene coincidencias en varios de los 132 puntos contenidos en los siete capítulos, principalmente en aquellos que tienen que ver con construir la paz desde una estrategia que no tenga que ver con la guerra y la violencia desatada por el expresidente Felipe Calderón Hinojosa. Pero que pidió añadir una propuesta de ella a la que llamó “Sigamos dialogando: Coincidencias y diferencias con el documento ‘COMPROMISO POR LA PAZ Estrategias de Política Pública para la Paz’ de la Conferencia del Episcopado Mexicano”, principalmente por los desacuerdos que tiene.

“Por honestidad y congruencia, he firmado el documento con la siguiente leyenda: ‘Firmo el documento en el entendido que hay una visión conjunta de construcción de la paz. Sin embargo, hay diversas afirmaciones y propuestas en las que no coincido”, afirmó tras haber signado el documento propuesto por la iglesia católica.

Sobre las coincidencias, dijo estar de acuerdo sobre lo de “superar la visión punitiva de autoritarismos y decretos de guerra, y avanzar a una visión de construcción de la paz atendiendo las causas”. En ese sentido, reconoció los esfuerzos de distintas iglesias, principalmente la católica, instituciones, organizaciones y actores sociales para atender las causas más profundas que provocan la violencia.

Respecto a las diferencias, Claudia Sheinbaum enfatizó que no comparte la idea “pesimista” que tiene la iglesia sobre el momento actual del tejido social. Por ejemplo, inicia con “Nuestra casa común y nuestro tejido social están en un proceso de degradación acelerada”, o, “En las últimas décadas hemos ido perdiendo el sentido de pertenencia a una colectividad”, o “La escucha, el diálogo, la participación, la confianza entre personas en los ámbitos más cercanos y con mayor razón respecto de las instituciones están rotas”.

Tampoco coincido con la visión de “Prevalecen el miedo, la impotencia, la desconfianza y la incertidumbre”. No coincido con “la descripción del problema” en el Tema de Seguridad en sus primeros tres párrafos, donde por ejemplo se afirma que “Aunada a estas grandes redes de criminalidad, ha aumentado en México la delincuencia común, alimentada por la marginación y la búsqueda de reconocimiento y justicia social. Frente a esto, las estrategias de seguridad a nivel nacional, estatal y local no solo han sido insuficientes, en ocasiones, han generado nuevas violencias”.

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Sobre ello, reviró que la guerra contra el narcotráfico de Felipe Calderón dejó resultados “desastrosos para México”, multiplicando por cuatro los homicidios dolosos al pasar de 8 mil 867 en 2007 a 36 mil 685 en 2018. Gran diferencia con lo reportado en 2023 cuando los homicidios dolosos se redujeron a 28 mil 264.

En el caso de la Ciudad de México cuando ella gobernó, precisó que de diciembre de 2018 a junio de 2023 la disminución de homicidios dolosos fue del 50 por ciento.
Otras estadísticas relevantes que apuntó la candidata morenista para responder las afirmaciones del Episcopado sobre la percepción de la violencia fue mostrar los resultados de la última Encuesta Nacional de Seguridad Urbana (ENSU) del INEGI del 2023 en la que se revela que la percepción de inseguridad en las ciudades del país pasó de 68.6 por ciento en 2018 a una reducción al 52.3 por ciento en 2023. Por lo que afirmó que “la visión que se presenta en el documento no corresponde a la de la mayoría de los mexicanos”. Sin embargo, estuvo de acuerdo en seguir avanzando.

En la capital del país, también sostuvo que pasó de tener una percepción en 2018, donde el 82.9 por ciento de la ciudadanía se sentía insegura a 55.3 por ciento en 2023. Asimismo, recordó que recientemente el INEGI ubicó el estado de ánimo promedio de los mexicanos en un nivel de 6.6 en enero de 2024, que es el mejor nivel de satisfacción reportado desde 2015, cuando inició esta encuesta.

Además, dijo estar en desacuerdo que se afirme que no hay “datos confiables” en el Sistema Nacional de Seguridad. “También no estoy de acuerdo con las referencias a una supuesta militarización o militarismo en el país y con los puntos en donde se minimiza o relativiza la función constitucional del Estado, en sus tres poderes y sus tres niveles de gobierno”.

Dijo que, si bien la construcción de la paz requiere de toda la sociedad, hay responsabilidades en cada uno de los poderes, en tanto que son depositarios de la soberanía popular, de compartir o delegar, empezando por las de la seguridad pública, la seguridad interior, la seguridad nacional y la gobernabilidad.

“Tampoco coincido en la visión que se presenta en torno a la Guardia Nacional o a algunos organismos autónomos. En la propuesta del tema 3, Justicia, se menciona que debe establecerse un ‘Mecanismo internacional contra la impunidad de atrocidades y corrupción con respaldo de la Organización de las Naciones Unidas. Adicionalmente una Comisión Nacional e Independiente de Verdad’. Sin embargo, no queda claro a qué se refiere este punto”, indicó.

En el caso de apoyo a jóvenes, Claudia Sheinbaum señaló que el documento propuesto por el Episcopado no se reconoce el cambio en la política del gobierno federal a partir de diciembre de 2018 y que rendido fruto. En el caso de la Ciudad de México, precisó que desarrolló diversas políticas e inclusive en coordinación con la propia Iglesia Católica. Como el aumento en el número de preparatoria, aumento en el número de universidades, los llamados PILARES, Jóvenes Unen al Barrio y Reconecta con la Paz, entre otros.

Por otro lado, dijo que no le quedaba claro la descripción del tema de “Gobernanza” cuando se establece que “México se debate entre un modelo de gobernanza autoritaria y criminal y un modelo de gobernanza democrática que hasta la fecha ha sido incompleto y precario».