“Se investiga a fondo qué le sucedió al obispo de Chilpancingo”, asegura el gobierno federal

El gobierno federal informó que se está investigando a fondo lo que le sucedió al obispo de Chilpancingo, Guerrero, Salvador Rangel Mendoza. Esto luego de que se diera a conocer que había desaparecido el pasado fin de semana y horas después la Fiscalía General del Estado de Morelos informara que se encontraba hospitalizado en un nosocomio de Cuernavaca, Morelos.

Desde Palacio Nacional, AMLO declaró que afortunadamente el obispo de Chilpancingo fue encontrado con vida. Asimismo, calificó como “muy satisfactorio” el que se supo que estaba en un hospital de Morelos, de modo que ahora se estaba haciendo la investigación completa porque su desaparición se registró, al parecer, desde el fin de semana, pero fue hasta ayer se presentó la denuncia.

Momentos después, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, expuso que desde el viernes autoridades estatales comenzaron la búsqueda, tras conocer la ausencia de Rangel Mendoza. A la par, precisó que posteriormente el gobierno federal se sumó a tales indagatorias y por fortuna se supo ya que está bien.

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“Por fortuna está bien, pero hay que investigar quiénes son los responsables y en dónde está, digamos, el proceso. Pero estamos mandando nosotros a un grupo de los compañeros que pertenecen a la Coordinación Nacional Antisecuestros y ya estamos en contacto con los elementos de Seguridad Pública, del almirante Guarneros para investigar a fondo cómo fueron los sucesos”, exclamó.

Rosa Icela Rodríguez dijo que por el momento no podía confirmar que el sacerdote fue secuestrado por la secrecía de las investigaciones y a falta de saber sus declaraciones, xmás allá de los indicios conocidos. En tanto, sobre la posibilidad de que se le brinde protección desde el gobierno dijo que primero verán cuáles son las necesidades del clérigo, ya que solamente se le podría dar con su aprobación.

Finalmente, AMLO retomó la palabra y opinó que lo más importante de todo es que el obispo se encontró en un hospital bien y ya está dado de alta. Además, aseguró que eso le pasa “a cualquier persona”, pero en este caso le ocurrió a un dirigente religioso y los adversarios suyos siempre están a la caza del gazapo o el error.