Propuesta de los diputados del PRI a la Mesa Directiva no logra la mayoría calificada

La Cámara de Diputados no ungió a Dulce María Sauri Riancho, del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) como la nueva presidenta de la Mesa Directiva como se preveía puesto que la propuesta de integración otorgada por este partido no alcanzó la mayoría calificada; es decir, el respaldo de dos terceras partes de las diputadas y diputados presentes.

Durante los posicionamientos, Verónica Juárez, coordinadora de los diputados del PRD, defendió su decisión de ceder a 4 de sus diputados para engrosar las filas del PRI considerando que ello fue para «hacer frente a las intentonas impositivas y generó las posibilidades de garantizar el acuerdo inicial» mediante el cual se acordó la rotación de la presidencia de la Mesa Directiva.

El primero en hablar por parte de la 4T fue Jorge Arturo Argüelles, coordinador del PES, quien expresó en tribuna que lo que hace diferentes a las personas en la política es su decisión entre lo que debían y lo que podían hacer, argumentando que «los conservadores y neoliberales» dañaron al país debido a que hicieron lo que querían usando el poder público para uso personal y no lo que debían.

A este siguió Fabiola Loya Hernández, a nombre de Movimiento Ciudadano, se congratuló por el respeto al pacto inicial de la legislatura donde se acordó que las decisiones se tomarán en un ambiente de pluralidad, respeto y apego a la ley.

El diputado Gerardo Fernández Noroña, aspirante a la presidencia de la Mesa Directiva, criticó a los perredistas que se sumaron al partido «tricolor» señalando que toda su vida cargarán con la vergüenza de ser priistas 15 minutos «para robarse la presidencia de la Cámara» pese a que ello correspondía al PT.

René Juárez Cisneros fue el siguiente en pasar, enviando un saludo al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) por su apoyo a la legalidad, sosteniendo que si bien muchas veces en contra de planteamientos, ideas y propuestas de este, hoy coincidía en que el Estado de Derecho debía estar sobre cualquier ambición desmedida y enfermiza.

Tras ello, Juan Carlos Romero Hicks subió para posicionarse desde el PAN a favor de la planilla propuesta por el PRI al considerar que este había recibido una mayor votación que el PT en las elecciones para la LXIV Legislatura en 2018, centrando posteriormente su participación en la sobrerrepresentación de los partidos del bloque «Juntos Haremos Historia».

Al final de la ronda de posicionamientos, el diputado Pablo Gómez tuvo la palabra, contestando a Romero Hicks a nombre de la bancada de Morena que no debían darle cuentas a ningún partido por su recomposición como bloque, en tanto que acusó a Acción Nacional de haberse beneficiado de esa misma ley y callando en todas las ocasiones que tuvo una sobrerrepresentación por un acuerdo con el PRI.

Finalmente, este se comprometió a que Morena buscaría crear un nuevo Estado de Derecho, por lo que tendrán que modificar la «absurda ley orgánica» que permitía maniobrar «a las derechas» para mantener el control de la Cámara de Diputados.

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La planilla propuesta por el PRI obtuvo la mayoría simple de los votos presentes, logrando 278 de 454 de los diputados presentes. Sin embargo, la ley establece que para aprobar la integración de la Mesa Directiva se requiere una mayoría calificada, por lo que continuará Laura Rojas y los demás integrantes de la última Mesa Directiva en sus cargos hasta el 5 de septiembre con el fin de que se logren los entendimientos necesarios.