Militares denuncian ante la FGR falsificación de documentos en caso Ayotzinapa

La defensa de los cuatro militares de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) detenidos por la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la normal rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, en septiembre de 2014, presentaron una denuncia entre la Fiscalía General de la República (FGR) en contra de quien o quienes resulten responsables de la fabricación de pruebas en la investigación del caso.

La denuncia de los representantes legales César Omar González y Alejandro Robledo Carretero de los cuatro militares — general José Rodríguez Pérez, el capitán José Martínez Crespo, el subteniente Fabián Alejandro Pirita Ochoa y el sargento Eduardo Mota Esquivel—, se da luego de que la semana pasada el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) desecharon las capturas de pantalla presentadas por el titular de la Covaj como una prueba válida pues dijeron que presentan muchas inconsistencias.

Pese a que los expertos internacionales dependientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) explicaron que las capturas de pantalla cuestionadas no son parte de la investigación por la cual se imputó a los militares, porque éstas detenciones más bien están basadas en otras que obtuvo la DEA y que se encuentran en Chicago además de la FGR, los abogados de los elementos castrenses pidieron la comparecencia de los cuatro expertos en calidad de testigos.

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En conferencia de prensa, los abogados defensores de los militares acusaron a Encinas Rodríguez, titular de la Comisión para la Verdad y la Justicia en el caso Ayotzinapa (COvaj) y a otros funcionarios, de que las afirmaciones que hizo el también subsecretario de Derechos humanos de la Secretaría de Gobernación en su informe sobre los hechos en Iguala, Guerrero, “son falsas”.

«Estas afirmaciones son falsas. Lo más grave es que evidencian la politización de un caso profundamente doloroso para México y acreditan la perversión del derecho penal con fines ideológicos que atentan contra la verdad y manchan el buen nombre del Ejército. Reiteramos, los miembros del Ejército no tuvieron participación en los hechos que falsamente le atribuye la comisión», aseguró Omar González.

Los abogados revelaron que en su denuncia ante la FGR agregaron un dictamen informático en el que presuntamente se descarta la veracidad de los chats que presentó Encinas Rodríguez durante su informe sobre el caso Ayotzinapa, donde se habla de un intercambio de comunicación con los sicarios de Guerreros Unidos sobre el destino que tendrían los normalistas. Aclararon que no se trata del mismo dictamen ya presentado por el GIEI.

Alejandro Robledo enfatizó que la denuncia se presentó ante la serie de pruebas falsificadas detectadas en el informe, entre ellas capturas de pantalla de WhatsApp, aunque reconoció que sus representados están sujetos a proceso por las declaraciones de un testigo protegido, no por esas capturas.

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Por otra parte, la defensa acusó al titular de la Covaj de poner en riesgo la investigación en “su afán de dar pruebas rápidas” además de hacer a un lado a sus colaboradores, haciendo mención de las capturas de pantalla que presuntamente inculpan a los miembros del Ejército, porque en ellas se afirma que el general José Rodríguez Pérez habría dado la orden para desaparecer a seis estudiantes, pero afirmó que la investigación “se basan en testimonios de oídas del testigo clave llamado “Juan” que asegura se trata de Gildardo López Astudillo, alias ‘El Gil’.

“En su intento por obtener pruebas rápidas hizo a un lado a sus colaboradores y puso en peligro el futuro de la investigación y de las esperanzas de las familias de los estudiantes”, añadió.

Y abundó que Alejandro Encinas “politizó” el caso dejando de lado las esperanzas de las familias al mismo tiempo “manchando la imagen del Ejército” el cual asegura “no tuvo participación en esos hechos”.

Asimismo, reiteraron que no hay algún delito que implique al general José Rodríguez Pérez, al capitán José Martínez Crespo, así como al subteniente Fabián Alejandro Pirita Ochoa y al sargento Eduardo Mota Esquivel.