Interpone Grupo Riobóo queja ante INE contra Anaya

Tras asegurar el abanderado de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya Cortés, que Andrés Manuel López Obrador le otorgó contratos de obra a José María Riobóo de manera directa por 170 millones de pesos, Grupo Riobóo presentó una denuncia y también una queja ante el Instituto Nacional Electoral (INE).

El abogado de Grupo Riobóo, Alberto Woolrich, afirmó que en la queja presentada al máximo órgano electoral se pide que se indague y se aplique la sanción que determine el Consejo General. Asimismo, se precisó que la demanda en materia civil se presentó por presunto daño moral.

«Él hace unas expresiones como ‘Esto es algo muy serio Andrés Manuel. Aquí estás con tu amigo el ingeniero Riobóo’. En ese momento, Ricardo Anaya, como pudimos observar todos los mexicanos, mostró ante los televidentes una fotografía en la que aparece el candidato Andrés Manuel López Obrador y el señor ingeniero Riobóo», explicó el representante legal.

«Y continúa diciendo el candidato Anaya: ‘Este señor participó para hacer el proyecto de las pistas del nuevo aeropuerto, era un contrato de mil millones de pesos y lo perdió’. ‘Te has convertido, Andrés Manuel, en lo que tanto criticabas, como los del PRI ya también tienes a tus contratistas favoritos'», expuso Woolrich.

Estas declaraciones del panista queretano son las que causaron revuelo y provocó que el abogado recurriera a interponer los recursos judiciales.

Del mismo modo, la defensa de Grupo Riobóo subrayó que las expresiones de Anaya no son verídicas, dado que los contratos que le fueron otorgados, en el cual se incluye la obra del segundo piso del Periférico de la Ciudad de México, fueron con base en sus conocimientos de construcción.

«Se le designó esta obra por sus conocimientos técnicos, por ser la persona más capacitada en la República y por los antecedentes de construcción que tiene», argumentó el litigante.

Por lo que añadió: «Un segundo piso es una obra delicada y si no tiene un sustento técnico apropiado, puede dar origen a una catástrofe. Gracias a los conocimientos de este hombre se ha evitado, no solamente en el segundo piso, que resistió el sismo que atravesamos, sino en todas las obras».

«No hay ningún ciudadano mexicano al que se le hubiera podido adjudicar esta obra porque el señor ingeniero Rioboó es el titular de las patentes y de las acciones que la propia ley de propiedad Industrial le confiere y sus inventos no pueden ser utilizados al libre albedrío por otras empresas porque él tiene la titularidad”, concluyó.