García Luna recibió sobornos millonarios del Cártel de Sinaloa, revela ‘El Grande’

Luego de semanas de espera y a poco más de tres años de su captura, el 9 de diciembre de 2019 en Dallas, Texas, el juicio contra Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública y cercano colaborador del expresidente panista Felipe Calderón Hinojosa, finalmente dio inicio en la Corte del Distrito Este de Brooklyn, Nueva York, Estados Unidos, en el que se le buscan probar las imputaciones de narcotráfico y de aceptar sobornos millonarios del Cártel de Sinaloa, entonces liderado por Joaquín Guzmán Loera ‘El Chapo’, actualmente cumpliendo una condena de cadena perpetua en una cárcel de ese país.

El primero de los 70 testigos de la Fiscalía llamado al estrado para argumentar en contra de García Luna fue el narcotraficante Sergio Enrique Villarreal Barragán alias ‘El Grande’, quien fue lugarteniente del Cártel de los Beltrán Leyva de 2001 a 2010. Durante su declaración, el excapo detenido en Puebla en 2010 y después extraditado a Estados Unidos, gobierno con el que colabora para evidenciar las complicidades de García Luna con el grupo delictivo al que pertenecía, aseguró que fue testigo de la entrega de sobornos al zar de la seguridad mexicana por parte de Arturo Beltrán Leyva a cambio de recibir información de grupos rivales, de operativos contra el cártel, así como de tener la facilidad de quitar y poner policías en gran parte del país.

“Los pagos (a García Luna) crecieron como creció el cártel, y sin ese apoyo hubiera sido imposible”, sostuvo ‘El Grande’. Al tiempo que afirmó que el cercano colaborador de Felipe Calderón “nos daba información sobre operaciones contra el cártel. Nos ayudaba a poner y quitar agentes en cualquier parte de México y compartía información para que pudiéramos golpear a nuestros rivales”.

lugarteniente del Cártel de los Beltrán Leyva, durante su presentación tras su captura en 2010. Foto: Cuartoscuro.

Al hacer un recuento de cómo ingresó al grupo criminal y su permanencia en él en el que destacó que fue reclutado por Amado Carrillo Fuentes cuando ya trabajaba para la Policía Federal y se encontraba supervisando un retén en Chihuahua cuando unas camionetas se detuvieron y de ella se bajaron unas personas armadas que vestían uniformes similares a los que usaban los agentes federales, pero éstos les apuntaron con armas. Fue ahí, dijo, cuando conoció a Amado Carrillo quien le dijo “O te alienas con nosotros o te largas de aquí”. Por lo que tras esa amenaza decidió unirse al grupo delictivo, entonces Cártel de Juárez.

Luego de ello, dijo que debido a problemas con Osiel Cárdenas del Cártel del Golfo, quien le quemó “sus negocios y mataron a su cuñado, este hizo que se acercara más Arturo Beltrán Leyva, entonces socio de ‘El Chapo’ Guzmán y el Mayo Zambada.

Respecto a los uniformes “iguales” que llevaban los miembros del cártel el día que lo reclutaron, afirmó que era el propio García Luna quien les proporcionaba credenciales falsas de la Agencia Federal de Investigación (AFI) que entonces dirigía a todos los miembros de la organización criminal, además de los uniformes y varias camionetas blindadas que parecían parte de la flotilla de la AFI.

Sobre ello, la fiscal Erin Reid preguntó al testigo qué “cómo se llamaba” en la identificación que le proporcionaron y el respondió que “mi identificación decía Gerardo Maynez Leal”.

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El testigo de la fiscalía afirmó que el secretario de Felipe Calderón ya estaba cobrando una cuota antes de que él entrara a la organización criminal en 2001 y que permaneció de la misma forma hasta el último día de vida de Arturo Beltrán Leyva, muerto en un enfrentamiento en 2008.

Por ello describió que en México la operación de la corrupción se da de dos grandes formas. “Hay dos tipos, uno es cuando le pagas a un funcionario para que mire hacia otro lado para dejar pasar algo, y el otro tipo es cuando participa en las actividades de la organización. Y García luna era del segundo tipo”.

‘El Grande’ también relató una ocasión en la que asegura que la Policía Federal interceptó un cargamento de cocaína de 2 toneladas que pertenecía al Cártel del Golfo, droga que subraya fue llevada a una casa de seguridad donde más tarde apareció Genaro García Luna junto a quien entonces era su mano derecha, Luis Cárdenas Palomino, actualmente preso en la prisión federal del Altiplano. Detalló que el acuerdo entre García Luna y sus jefes era que el funcionario federal se quedaba con la mitad del dinero que valían los cargamentos. En ese caso, el cálculo “era de una buena cantidad”, entre 14 y 16 millones dólares. Dicho dinero, afirmó, fue entregado en varias cajas de cartón llenas de billetes de 20 dólares.

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Para terminar el primer día del juicio contra García Luna en el que se conoció el primer testimonio, ‘El Grande’ aseguró que estuvo presente en una ocasión en una reunión que sostuvo Arturo Beltrán Leyva con Genaro García Luna en una casa de seguridad en la Ciudad de México donde se le pagó un soborno de 1.5 millones de dólares cuyo monto le fue entregado en una bolsa de lona negra con billetes de 100 dólares.

A medida que el cártel crecía, explicó el testigo, el pago por sobornos mensuales a quien además fue exdirector de la AFI también aumentaba porque el volumen de droga traficada era cada vez mayor, es por ello que sostiene que las reuniones entre el capo y el funcionario se dieron de manera mensual de 2004 a 2006 en la que “pagaban” por sus servicios.

«Los pagos eran puntuales (cada mes) y aumentaban a medida que crecía el cártel, porque el volumen de drogas y el crecimiento era mayor. Eso significaba que las ganancias también eran mayores”, dijo.

Dichos pagos, afirma, “fueron la mejor inversión” que hicieron los capos con su dinero pues “nunca tuvimos absolutamente ningún problema”, cuestión por la que siempre estuvieron satisfechos lo líderes del Cártel de Sinaloa.

Además de los pagos en efectivos que recibía de manera mensual, según los dichos de ‘El Grande’, Beltrán Leyva en una ocasión le envió de regalo una moto Harley Davidson edición especial, lo que consideró un evento “inusual” pues los pagos solían ser únicamente en efectivo. Sin embargo, dicho “regalo” fue agradecido por García Luna en una conversación que tuvo con Beltrán Leyva que él logró escuchar.

Además, reveló que “otros” de los líderes del cártel se referían al colaborador cercano de Felipe Calderón como “El compa” o “El Tartamudo”.