“El nuevo Nuevo León es incorruptible. Todo lo que huela a corrupción se va, no podemos perder la confianza de la ciudadanía”, escribió en su cuenta de Instagram el gobernador de Nuevo León, Samuel García después de cesar a Humberto Ramos Hinojosa como director del Metrorrey por presuntos actos de corrupción.

De acuerdo con un diario local, el ahora exfuncionario estatal había incurrido en conflicto de interés al ser el apoderado legal de una empresa que actualmente participa en una licitación para darle servicios al transporte colectivo regio del que también era el titular.

Vías y Desarrollos, S.A. de C.V., empresa de la que Ramos es apoderado, busca darle mantenimiento estructural de cimentación a la Línea 1 del Metrorrey por un valor de 2 millones 900 mil 012 pesos.

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Ante ello, Samuel García aseguró que no perderá la confianza de la ciudadanía por actos de este tipo, y advirtió que si hay evidencia enviará a Ramos Hinojosa a la cárcel.

“Este señor se va a su casa, y si hay evidencia se va a la cárcel”, dijo en su post en Instagram que acompañó con la fotografía del exdirectivo del transporte colectivo.
En el escándalo, presuntamente también está implicado el director de nuevos proyectos de Metrorrey, Enrique Xavier Lozano, quien también aparece como apoderado de la empresa que busca ganar el contrato millonario por las reparaciones del metro.

Pero el conflicto de interés con Ramos Hinojosa vendría de muchos años atrás, según documenta la prensa regia, pues entre 2005 y 2007, este fungía como residente general del Metrorrey, fecha en que la empresa Vías y Desarrollos, S.A. de C.V. obtuvo un contrato para dirigir el diseño de la extensión de la Línea 2 de metro.

Desde el inicio de su gestión, el gobernador de Movimiento Ciudadano aseguró que en su mandato no habría cabida a la corrupción y, por ello, dijo, separó de su cargo al director general del Metrorrey.