Chabaud aborda abusos laborales a migrantes en ‘Esperamos al Gordo’

El dramaturgo y periodista cultural Jaime Chabaud recuerda que el movimiento Teatro por la Dignidad surgió en 2017 como una respuesta a las políticas agresivas y brutales de Donald Trump respecto a la migración, en especial la mexicana, en una enorme paradoja siendo él mismo nieto de migrantes.
 
En ese contexto se circunscribe su obra, ‘Esperamos al Gordo‘, tercera entrega de la nueva edición de la serie impulsada por Luis de Tavira desde hace dos años, que ya presentó No volveré y La vieja rabiosa del norte. Chabaud señala que en este drama quiso tratar el tema desde el Otro Lado, y no como es tradicional en el tema de la migración con historias sobre cómo los cruces de la frontera.
 
“A mí me interesó un fenómeno que es el de trabajadores y trabajadores de las lecherías en EU, entre ellos del estado de Washington, donde además de pagárseles un salario bastante miserable –aunque  no respecto de los salarios de México o Centroamérica, porque ningún estadounidense trabajaría por esos salarios, de hecho la industria lechera quebraría o tendría que elevar los precios de manera desmesurada, si no fuera por el trabajo migrante–, trabajan en jornadas de 12 horas 7 días a la semana”, refirió Chabaud, director también de la revista de crítica teatral Paso de Gato.
 
El dramaturgo se centró así en una joven familia de migrantes, un hermano, una hermana y un amigo de toda la infancia que comparte el departamento y justamente les sorprende que el hermano que se ha quedado en México cuidando a la madre, que es El Gordo, les anuncia en un mensaje bastante caótico que va a migrar hacia Estados Unidos con ellos.
 
Y entonces los hermanos están esperando al Gordo. Pero la obra se trata esencialmente sobre las malas condiciones laborales en las que trabajan los migrantes y el miedo permanente a ser deportados por los agentes de Migración de Estados Unidos.
 
Hombre de teatro, Chabaud subrayó en la presentación de las cuatro obras que se ofrecen en el foro Sor Juana Inés de la Cruz, que en todo el discurso de Trump “se filtra o una enorme estupidez o un materialismo sanguinario porque el absurdo de su discurso implicaría que si América es para los americanos tendría que ser para los habitantes originarios y no para la mezcla cultural maravillosa que tiene Estados Unidos, y que buena parte de sus palabras no corresponden al sentir de la mayoría de los estadounidenses y mucho menos a sus artistas, que también le responden a sus política”.
 
‘Esperamos al gordo‘, dirigida por Belén Aguilar en codirección con Mario Espinosa, se presenta del 29 de agosto al 8 de septiembre, en el Foro Sor Juana Inés de la Cruz  del Centro Cultural Universitario de la UNAM, en funciones jueves y viernes, 20:00 horas; sábados, 19:00 horas y domingos, 18:00 horas.
 
Sobre la pieza que va del drama a la comedia, su directora, Belén Aguilar, comenta que “es una ficción construida a partir de hechos reales que el dramaturgo documentó.”
 
Egresada del Centro Universitario de Teatro (CUT) refiere que es una historia entre cuatro hermanos, aunque no todos de sangre, que luchan arduamente por alcanzar sus sueños en Estados Unidos. Quique desea entrar a la Universidad, Christian y Mago abrir un restaurante, para cumplir el sueño de su madre que es reunirse con ellos en Estados Unidos. Esta familia sortea los problemas y maltratos que sufren los migrantes mexicanos en Estados Unidos gracias a su entrañable relación. Al recibir la noticia de que su hermano viene en camino, sus planes se complican. En el camino, ellos y sus sueños, se irán transformando casi por completo.
 
“Toda historia de migrantes es una historia de valor y fuerza. Se necesita coraje para emprender un viaje como el que nuestros personajes hacen. Este es el retrato de cuatro jóvenes que se arman de todo eso para cumplir sus sueños. Nos interesa generar empatía y a través de esta historia sensibilizar al espectador dignificando la figura de nuestros migrantes mexicanos”, expresó Aguilar durante la presentación del nuevo ciclo, en su segunda vez que dirige con Teatro UNAM.
 
“Es un privilegio trabajar con este equipo y con la obra del maestro Chabaud. Si bien es un texto que trata temas bastante duros y dolorosos para nosotros, es un texto que es abordado con cierta comedia, entonces es una obra en la que sí vamos a ver escenas terribles, como es nuestra realidad; sin embargo, creemos que la mejor forma de abordarlo es desde la risa, desde poder sentir empatía con estos personajes entrañables a partir de la risa. Entonces se la van a pasar muy bien”, expresó la también actriz.
 
Agregó que para ella es también de mucha alegría poder dirigir Esperamos al Gordo porque uno de los personajes más fuertes es una mujer, de alrededor de 30 años.
 
“Es como si fuera yo, nunca he sido una migrante, pero en mi familia sí hay migrantes, entonces me representa mucho, habla mucho de lo que soy y de mi generación. Creo que es muy importante que haya una voz femenina, joven en la obra”, dijo Belén Aguilar.

Uno de los objetivos de esta puesta, según su autor y directores, es el de visibilizar la injusticia y sufrimiento que viven los mexicanos que emprenden un viaje peligroso y deciden ir a vivir a Estados Unidos de manera ilegal, resultado de la falta de oportunidades en su país natal.

Sin embargo, sostienen, este núcleo familiar es un espejo de lo que sucede en el exterior. Estos personajes están en un estado de alerta permanente: a la defensiva de la migra, del patrón, del amigo que pueda delatarlos o incluso del hermano. Estos modelos de injusticia se repiten de manera cíclica y visibilizarlos es apenas el punto de partida para poder cambiarlos.

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Las terribles experiencias contra las que se enfrentan los personajes en esta puesta en escena, los hacen tener una revelación; se dan cuenta de que están replicando en su casa los abusos que sufren en la calle y en consecuencia sus decisiones dan un giro de 180 grados.
 
El elenco artístico que participa en esta puesta en escena son actores de Carretera 45: Mago Lozano, Christian Cortés, Enrique Flores y Diego Santana. Y el equipo de creativos: escenografía, Jesús Hernández; iluminación, Gabriel Pascal*; vestuario Jerildy Bosch; diseño sonoro y musicalización, Cristóbal Maryán.

En este ciclo Teatro por la Dignidad, se presentan cuatro puestas en escena, tres de ellas hechas especialmente: No volveré, de Estela Leñero Franco; ‘Esperamos al gordo‘, de Jaime Chabaud; Cremación, de Juan Villoro; y la cuarta La Vieja Rabiosa del Norte, de Antonio Zúñiga, obra ganadora del Programa Nacional de Teatro Escolar del INBAL.

Paralelamente a este ciclo se llevan a cabo diversas actividades en torno a la migración, y los problemas que esto ha conllevado, a través de la Cátedra Nelson Mandela y la Dirección de Teatro y Cultura UNAM.
 
Una de estas actividades es la mesa de reflexión Tráfico de migrantes, ponencia será impartida el martes 3 de septiembre, a las 19 horas, por Ana Lorena Delgadillo, directora ejecutiva y socia fundadora de la Fundación para la Justicia y el Estado Democrático de Derecho. Modera Jacobo Dayán, quien dirige la Cátedra Nelson Mandela de Derechos Humanos en las Artes.