“Puros alcahuetes de corruptos firmaron el desplegado contra los libros de texto”: AMLO

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) calificó como alcahuetes a quienes firmaron el desplegado publicado el día martes contra los libros de texto, mismo que cuenta con firmas desde académicos críticos del gobierno federal hasta funcionarios y exfuncionarios emanados de los partidos de oposición.

Durante la ‘mañanera’, AMLO destacó que volvieron los “abajofirmantes” ahora para oponerse a los nuevos libros de texto gratuitos; asimismo, los describió como “alcahuetes” de corruptos. Al respecto, indicó que estos ni siquiera han leído los materiales pero están condenando públicamente el trabajo de la Secretaría de Educación Pública (SEP) por cuestiones ideológicas.

“Como 100 pseudointelectuales. Me acuerdo uno de ellos, de Sheridan, que dijo que el pueblo de México era un pueblo malo […] Yo siempre sostengo, además lo puedo probar, estoy escribiendo sobre eso, de que a nosotros nos ha salvado nuestra herencia cultural, porque nuestro pueblo es muy solidario, muy fraterno, es un pueblo buen”, pronunció.

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López Obrador expuso que dentro de los «impresentables» que firmaron el documento también está el empresario Claudio X. González. En tanto, indicó que también está el escritor Héctor Aguilar Camín, aunque aclaró que este tiene diferencias con el gobierno porque era uno de los que hacían negocios con los libros de texto gratuitos, desencuentro similar al que también vivieron los libreros de 1960 cuando el expresidente Adolfo López Mateos promovió la creación de estos materiales educativos.

“Hay dos periódicos que recibían más de mil millones al año, dos periódicos que hacían los libros, entre otros; entonces, esos están lanzadísimos, incluso empresas extranjeras que también financiaban a intelectuales y les daban premios, a veces se los llevaban a España y los condecoraban allá en la corte, la monarquía”, argumentó AMLO.

Este pasado martes, 255 académicos, políticos y miembros de organizaciones sociales publicaron y firmaron un texto en el cual señalan que usar los libros de texto sería un «crimen contra la nación» porque no se fundan en programas de estudio oficiales. Asimismo, aseguraron que estos no fueron sometidos a consultas públicas y que proponen un cambio radical en la práctica de la enseñanza.

Pese a que desde la SEP se ha argumentado que los libros proponen un esquema transversal de aprendizaje, con temas que permitan abordar al mismo tiempo distintas materias, estos insistieron en que se quiere «desaparecer» asignaturas como Matemáticas, Lengua «Española», Física, Biología, Formación Cívica y Ética, Historia y Geografía.

Asimismo, condenaron que en los libros se presente supuestamente a México como un país colonizado por el imperialismo europeo y que tengan un intercambio con habitantes del entorno. «Nunca se aclara quién se hará responsable de la seguridad de los alumnos cuando salgan a la calle», dice.

Además de los «abajofirmantes» citados por el presidente, también apoyaron este pronunciamiento el politólogo Mauricio Merino; la exconsejera electoral María Marván Laborde; el senador sin partido e impulsor de la alianza opositora Emilio Álvarez Icaza; el senador panista Gustavo A. Madero; la subsecretaria de Electricidad de Enrique Peña Nieto, Lourdes Melgar Palacios; el expresidente del extinto Instituto Federal Electoral (INE), José Woldenberg; el secretario ejecutivo de Lorenzo Córdova Vianello en el INE, Edmundo Molina Jacobo; y el exconsejero electoral Ciro Murayama.