¿Tienes las deudas hasta el cuello? No te rindas

La deuda es una herramienta financiera bastante efectiva que nos puede ayudar muchísimo a llegar a nuestras metas y mantener en dinamismo tu dinero siempre y cuando se administre de forma racional e inteligente, sin embargo, gran parte de la población carece de educación y disciplina financiera que nos deja vulnerables ante un mundo financiero tan complejo.

Es bastante sencillo caer en excesos, sobre todo en jóvenes que no tienen objetivos claros y pierden el control a la mínima provocación, y seamos honestos, todos pasamos esa etapa de descontrol en la que pensamos que podemos comernos el mundo entero sin ninguna consecuencia en el futuro, nada más alejado de la realidad. Compras exageradas, gastos sin fundamentos, falta de planeación financiera, nula cultura del ahorro, falta de iniciativa para generar distintas fuentes de ingreso, etc.…. son solo algunos de los errores que nos llevan a ahogarnos en deudas enormes.

Todos estos malos hábitos en nuestra administración se van arrastrando con el paso de los años y volviéndose cada vez más difíciles de corregir generando problemas más complicados, y ojo, no es un problema únicamente de una parte de la población o una generación en específico. En este tenor es fácil sentirse abrumado cuando las deudas se te salen por completo de las manos llegando a situaciones delicadas. No obstante, en este punto, no es imposible salir de una situación así de compleja y existen varias formas de comenzar a salir del bache.

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Si caíste en deudas enormes, tienes un problema de disciplina financiera y lo primero que debes atacar es eso, la gran mayoría de aspectos en la vida requieren de cierto nivel de disciplina para lograr éxito, tus finanzas no son la excepción, comienza por ordenar tus prioridades, una deuda grande sin lugar a dudas requiere de prioridad inmediata, tu objetivo en este punto es saldar tu deuda y si pretendes alcanzar ese objetivo, la disciplina será tu primer paso. Si tienes varias deudas, dale más prioridad a aquellas que generen mayor cantidad de intereses.

Negocia las deudas con tus acreedores, en muchas ocasiones es posible negociar con las instituciones financieras para acordar tasas de interés más bajas, intereses congelados o tiempos de pago más flexibles que te pueden ayudar a crear una estrategia de pago más efectiva y que se adapta de mejor manera a tus posibilidades

Por ningún motivo adquieras más deudas, suena lógico, pero hay que darle más énfasis a esta situación, parte de la disciplina está en saber que nuestras finanzas están contra las cuerdas y debemos darles un respiro, es difícil controlarse en un mundo con tanta mercadotécnica sin embargo no olvides tu objetivo.

Acude con un asesor financiero si sientes que la situación no mejora, será un gasto menor en comparación con todo el dinero que podrías perder más adelante, un asesor te orientará para evaluar tu situación exacta, escoger la estrategia más eficaz y que se adapte mejor a tus necesidades. Recuerda lo siguiente, pedir ayuda no significa que seamos débiles, más bien que tenemos la ambición para lograr las cosas.

Es bastante difícil dar vuelta a una situación tan compleja como lo son las deudas enormes, sin embargo con un poco de esfuerzo poco a poco se puede salir adelante, reconocer que tenemos un problema y poner manos a la obra es la mejor decisión que podemos tomar en este momento.