Este lunes el gobierno de Estados Unidos, en alianza con el de México, reinició el programa emblemático de la administración del expresidente Donald Trump ‘Quédate en México’ con el que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador acepta que los migrantes esperen en territorio nacional mientras realizan su trámite de asilo.

Este programa impulsado por Trump obliga a los migrantes, principalmente centroamericanos, a permanecer en México durante el tiempo en que se lleven a cabo a sus audiencias de petición de asilo en Estados Unidos (EU) con fines humanitarios al ser desplazados por la violencia, situación que puede durar varios meses.

Pese a que Joe Biden derogó este programa, cuando llegó a la presidencia de EU, recientemente un juez le ordenó reiniciarlo, y desde entonces la administración del demócrata ha negociado con el gobierno de López Obrador, que apenas la semana pasada anunció que sí ayudaría a Biden únicamente por “fines humanitarios”.

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Sin embargo, activistas de ambos países se han pronunciado en contra del reinicio del programa pues afirman que no hay garantías para los migrantes, además de que se pone en riesgo su integridad física al estar a merced de grupos criminales en México.

El analista de Human Rights First (HRF), Kennji Kiuzuka, ha advertido que sin importar la forma en que el gobierno de Biden trate de adornar el programa, “no existe forma de que se implemente de manera humanitaria y segura”.

Tan solo en la era Trump al menos 70 mil migrantes fueron regresados a México para esperar su trámite, mientras permanecían en hacinamiento en los pocos refugios que existen en la frontera, u otros formaron una comuna bajo los puentes fronterizos.

HRF ha documentado más de mil 500 ataques contra los solicitantes de asilo que fueron devueltos a México bajo el esquema del programa y entre los delitos de los que fueron víctimas están, tortura, secuestro, asaltos y violación.

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Por su parte, la iglesia católica mexicana también se pronunció en contra del regreso del ‘Quédate en México’ pues afirma que se violan principios internacionales en materia de refugio y asilo.

“Recibimos con decepción la noticia de que el gobierno de México ha decidido reanudar el programa MPP mejor conocido como ´Quédate en México´, ya que éste viola múltiples principios internacionales en materia de refugio y asilo, como el derecho a debido proceso y a la no devolución, y no permite el debido ejercicio de los derechos fundamentales de las personas solicitantes del reconocimiento de la condición de refugiado”, dijo en un comunicado el Episcopado mexicano.

Mientras tanto, esta tarde, Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, reiteró que el gobierno de México aceptó, “en pleno ejercicio de su soberanía”, el regreso del programa como “medida de carácter humanitario”, ello, para que las personas que no puedan regresar a sus países de origen por razones de seguridad, pobreza, persecución o violencia, puedan permanecer en México durante su proceso de asilo.