El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) reaccionó a las críticas desatadas por sus comentarios sobre la derechización de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), preguntando qué es lo que hizo este centro de estudios superiores de 1988 al 2018.

Desde Palacio Nacional, el mandatario mexicano expresó que hay 20 o 30 millones de mexicanos conservadores debido a que amplios sectores de la clase media responden a esa ideología. Aseguró que en este grupo también hay académicos y que muestra de ello eran las reacciones a sus críticas vertidas contra la universidad dirigida actualmente por Enrique Graue.

«¿Qué hacía cuando se saqueó al país?», expresó AMLO respecto a la UNAM añadiendo que estaba seguro de sus afirmaciones de días anteriores, pues durante el periodo neoliberal se llenó de conservadores sus facultades de ciencias sociales. Este señaló que dicho fenómeno no fue únicamente durante las últimas dos rectorías, incluyendo la del expriista José Narro, sino también durante el periodo de Juan Ramón de la Fuente, su actual embajador en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

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El presidente reclamó que en el año 2000, cuando era candidato a la jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal (D.F.), acompañó a una presentación en Ciudad Universitaria a Cuauhtémoc Cárdenas y que les organizaron una celada con porros. «Estaba dominada la UNAM por lo más retrógrada que había», sostuvo López Obrador.

Asimismo, relató que un profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) acusó sin pruebas a uno de sus hijos de tener concesiones de grúas, a lo cual uno de ellos exigió que sostuviera sus dichos, ante lo cual el maestro se retractó.

Finalmente, se pronunció ante las críticas de Santiago Creel, diputado del Partido Acción Nacional (PAN), quien le acusó de mentir que no se impartían clases de Derecho con corte social, pues él imparte Derecho Constitucional en la UNAM. Ante eso, el mandatario no dio crédito al considerar que la familia del también exsecretario de Gobernación estuvo en contra de la entrega de tierras a los campesinos y la expropiación petrolera, por lo que su tradición es contraria a la letra del artículo 27 constitucional.